El objeto de este libro, integrado por dos tomos, es la historia del esoterismo occidental en la Iberoamérica de los siglos XVI-XX.
https://publicaciones.filo.uba.ar/el-esoterismo-occidental-en-iberoam%C3%A9rica-siglos-xvi-xx-tomo-2
El objeto de este libro, integrado por dos tomos, es la historia del esoterismo occidental en la Iberoamérica de los siglos XVI-XX.
https://publicaciones.filo.uba.ar/el-esoterismo-occidental-en-iberoam%C3%A9rica-siglos-xvi-xx-tomo-2
Hacia mediados de la baja Edad Media, en una época de acelerada transición cultural, surgen los escritos del florentino Dante Alighieri. Poeta, guerrero y político, Dante supo mejor que ninguno cantarle a la belleza y al amor, encarnados en la figura sublime de Beatriz. Es a ella a quien le consagra su obra cumbre, La Divina Comedia, donde nos ofrece además una notable concepción fantástico-científica del universo, y quizás el viaje de ultratumba más célebre de la literatura universal. Este libro habla sobre la vida y la poesía de Dante Alighieri, poniendo especial énfasis en sus conocimientos astronómicos y cosmológicos plasmados en varias de sus obras. En estas, Dante demuestra ser uno de los mayores exponentes de la literatura italiana y el instaurador de una nueva visión del universo, que amalgamó la filosofía natural de los pensadores clásicos griegos con el mundo religioso de su época.
https://www.academia.edu/29944288/Po%C3%A9tica_Astron%C3%B3mica_El_cosmos_de_Dante_Alighier
Hijo de Alighiero di Bellincione y de Bella (o quizás Gabriella), Dante Alighieri (o quizás "Durante" Alighieri, en su forma completa original) nació en 1265 en Florencia, capital de la Toscana. La fecha exacta no ha llegado a nosotros, ya que lo poco que sabemos sobre su vida es lo que quedó escrito en diversos documentos de la época, en comentarios de otros escritores y en sus propias obras literarias. En estas últimas, Dante no se mostró demasiado preciso.
Sin embargo, en el canto XXII del Paraíso, el tercer cántico de su obra cumbre, la Divina Comedia, Dante declaró haber nacido bajo la influencia de Géminis, conforme a su signo astrológico, y siguiendo una tradición antiquísima aunque de dudosa reputación actual.
La Astrología se puede definir como una técnica para estudiar
los ciclos vitales. Su principal propósito es establecer la existencia
de estructuras regulares en la secuencia de los hechos que forman
parte de la experiencia adquirida interior y exteriormente por el
hombre; además, sirve para utilizar el conocimiento de estas estructuras
para poder controlar o darle un significado a estas experiencias.
Una persona adquiere el dominio conforme va aprendiendo
a controlar el génesis, el desarrollo y la periodicidad de sus
experiencias. Esta es la meta que pretende alcanzar el “adepto” o el
científico, una meta que consiste en cronometrar con precisión las
acciones y saber ajustarse a las reacciones inesperadas. Por otra parte,
conforme le da el hombre significado a sus experiencias, remitiéndose
a sus propios ciclos personales e individuales o a los ciclos
colectivos en general, va desarrollando una actitud consciente e inclusiva
hacia la vida, adquiriendo así comprensión y sabiduría, las
metas del filósofo. Desde luego, se puede decir que el estudio de los
ciclos –es decir, de las actividades periódicas en la naturaleza (ya
sean humanas o de otra índole)– es la raíz de todo conocimiento
importante y significativo, ya sea de tipo científico y filosófico. Y el
estudio de los ciclos es ni más ni menos que un estudio del tiempo.
https://www.academia.edu/64379040/Rudhyar_EL_CICLO_DE_LAS_LUNACIONES
La extraordinaria importancia que las prácticas adivinatorias y mágicas
de la Antigiiedad tuvieron no sólo en la religión, sino también en la
política, en el ejército o en la sociedad, contrasta sin embargo con los
escasos nombres de adivinos, astrólogos y magos conservados por las
fuentes.
Ya el Antiguo Testamento se refiere a innumerables «profetas», «videntes
», «hombres de Dios» cuyos nombres, en la mayoría de los casos,
desconocemos.
Del mundo clásico greco-romano, sobre todo antes de la era cristiana,
ignoramos los nombres de muchos adivinos, profetas y «hombres
divinos» como es el caso, por ejemplo, del «griego desconocido»
(graecus ignobilis) que según Livio introdujo en Roma la celebración de
las célebres Bacanales del 186 a.C.:
La cosa comenzó con la llegada a Etruria de un griego desconocido que no poseía
ninguna de las muchas artes que difundió entre nosotros el más culto de los
pueblos para el cultivo de la mente y del cuerpo: una mezcla de practicante de
ritos y adivino; y no era de los que imbuyen el error en las mentes con unas
prácticas religiosas declaradas predicando abiertamente la doctrina de la que
viven, sino un maestro de ritos ocultos y nocturnos (Liv., XXXIX, 8, 3-4).
El texto está en inglés. https://dokumen.pub/qdownload/antiochus-of-athens-the-tesaurustext- greek-track-vol-2-b.html