viernes, 15 de enero de 2016

El ciclo lunar progresado. Por Frédérique Boele.







 

El Ciclo Lunar Progresado

Por Frédérique Boele

Introducción

Este artículo se publicó por primera vez en Febrero/Marzo 2006 en The Mountain Astrologer. Agradecemos a Ms. Boele y el TMA por el permiso para poder publicarlo.
Cada mes una Luna Nueva invisible indica la posibilidad de iniciar algo nuevo y, mientras el ciclo progresa y la Luna crece, podemos aprender, crecer y dedicar tiempo a experimentar. Durante la segunda mitad del ciclo, después de la Luna Llena, es la ocasión de recoger lo que hemos sembrado, reflexionar y finalmente darnos cuenta de lo que concebimos en un comienzo. En su excelente serie "Observar la Luna"[1] Dana Gerhardt presenta este ciclo mensual a los lectores del TMA.
El Sol y la Luna progresados representan la misma danza cada treinta años, tiempo que depende por completo de nuestra carta natal personal [2]. Cuando la Luna progresada (que se mueve aproximadamente 13 grados por año) se une al Sol progresado (que viaja a 1 grado por año), cada uno de nosotros experimentamos de forma individual una Luna Nueva progresada por un periodo de tres años y medio. Para la gente nacida durante un Cuarto Menguante o fase Balsámica, es decir hacia el final del ciclo lunar mensual, esto suele suceder a edades tempranas; para aquellos nacidos durante la Luna Nueva o el Cuarto Creciente, por otro lado, suele llegar hacia la mitad o al final de la veintena. De este modo, el ciclo progresado de la Luna late lenta pero profundamente a un ritmo significativo en nuestras vidas, el cual podemos ignorar con facilidad pero que en realidad puede colocar los lentos tránsitos de Plutón en un contexto más amplio. Por lo tanto, es preferible, prestar atención a cualquier fase de la Luna progresada en la que nos encontremos y armonizar con él.

Sobre este artículo

Mientras lee este artículo el lector se dará cuenta de que, aunque muchas de mis observaciones no resultan tan diferentes de aquellas escritas con anterioridad sobre el tema, yo utilizo un marco diferente al establecer una relación entre las fases lunares, las casas y los signos[3].  La mayoría de los astrólogos asumen que la conjunción (y por tanto la Luna Nueva) se relaciona con el 0° Aries y derivan el resto de aspectos y fases lunares a partir de dicho punto (Ej. El Cuarto Creciente se correspondería a Cáncer, el quincuncio a Virgo), yo creo firmemente que  la conjunción y el comienzo del ciclo debería compararse con el IC, el comienzo de la cuarta casa. Aries y el Ascendente representan el amanecer, el comienzo de la primavera (al menos en el Hemisferio Norte), una ruptura radical con el pasado y, por supuesto el momento del nacimiento. Pero el nacimiento, sin embargo representando un comienzo, es tan sólo la continuación de la vida que se puso en marcha en el momento de la concepción. Del mismo modo, la medianoche es el momento en que el viejo día muere y el nuevo día nace. A menudo el IC representa el final de la vida;  el final de un ciclo implica también el comienzo de una nueva vida. Estoy convencida de que la teoría ‘conjunción = 0° Aries’ necesita ser revisada. Si mis conclusiones no contradicen a las de otros autores, creo que se debe a que muy pocos han aplicado esta teoría de forma consistente. La mayoría, de hecho, han confiado en sus propias observaciones y en su experiencia y yo haré lo mismo, porque no creo que el significado de las fases lunares pueda ser reducido totalmente a las interpretaciones tradicionales de las casas. Sin embargo, creo que estableciendo el comienzo del ciclo en el IC arrojaremos nueva luz sobre el ciclo lunar y es lo que espero explorar en este artículo.

La Luna Nueva Progresada

(Separación Angular Sol - Luna: 0°-44°)

La conjunción entre el Sol y la Luna progresados es uno de los puntos cruciales de nuestras vidas, ya que indica tanto el comienzo como el final del ciclo.
Nuestra fase de Luna Nueva por lo tanto puede comenzar con un sentimiento de superación de que algo se acabó. Paradójicamente, la conjunción, al cerrar el círculo, puede representar la separación más evidente con el pasado que el resto de aspectos del ciclo lunar y podemos vernos confrontados con pérdidas y finales. A menudo, es necesario un periodo de luto y reorientación. Puede ser el punto de inflexión en la carrera de una persona, un periodo de obscuridad, desempleo y confusión. Después de diez años, la Primera-Ministra británica Margaret Tatcher se vio obligada a renunciar y Ringo Starr y Paul McCartney vivieron la ruptura de los Beatles. El final representado por esta fase del ciclo lunar puede incluso tomar la forma de un logro aún mayor cuyo resultado no sea obvio. Buzz Aldrin se convirtió en el segundo hombre en pisar la Luna pero sufrió de una severa depresión, la cual, sospechamos, tuvo algo que ver con el sentimiento “¿Y ahora qué?” [4]
Sin embargo, mientras un ciclo acaba, otro comienza. Podemos comparar la Luna Nueva con la mitad del Invierno, o con los tránsitos al Nadir, el IC, el punto más bajo, privado y obscuro de la carta. La imagen es la de una semilla germinando pero que todavía está oculta en el suelo, o la de un óvulo fertilizado por un espermatozoide, creciendo y dividiéndose mientras la madre aún no sabe que está embarazada. Como muestran estas imágenes, los comienzos durante la fase de Luna Nueva pueden ser pequeños y apenas visibles. Podemos encontrarnos en medio de la oscuridad durante la Luna Nueva Progresada mientras los planes y proyectos o, incluso una nueva identidad, no hayan cristalizado aún. Especialmente para la gente joven, la Luna Nueva Progresada puede significar un periodo de confusión sobre que dirección tomar. Un periodo de ensoñación, en el que muchas cosas pueden suceder, pero sólo una o dos en realidad echarán raices. Lo más sensato es permitir a los jóvenes con una Luna Nueva Progresada ese periodo de ensoñación y no apresurarles a tomar una u otra dirección.
Durante la Luna Nueva nos comportamos como niños. En los mitos y cuentos el joven héroe a menudo comienza su nueva vida en la obscuridad, en lo que podemos llamar la situación de la cuarta casa. Él (o ella) pueden ser vulnerables, estar ocultos o aislados del mundo o simplemente sentirse inocentemente confortables y restringidos en un entorno similar al útero materno. Podemos pensar en Sigfrido, siendo criado bajo tierra por los gnomos que alimentaban las raices del árbol de la vida (que podemos asociar con el eje IC/MC); Frodo Baggins en su agujero hobbit; o Harry Potter en su armario situado bajo las escaleras. Durante la fase de Luna Nueva, por tanto, nos encontramos en una situación similar y resulta útil pensar en nosotros mismos experimentando la niñez de un héroe, independientemente de la edad que tengamos en realidad.
Dado que la Luna Nueva Progresada es como un tránsito sobre el IC, a menudo esta fase significa que tenemos que mudarnos y echar raices en otro lugar. La mayoría de las veces, sin embargo, hay un movimiento distinto hacia el hogar. Al retirarnos del mundo, buscamos un lugar seguro en el que hibernar durante la crisis. Podemos hallarnos teniendo que volver a conectar con nuestras propias raices. Esto a menudo sucede literalmente. Una de mis clientas tuvo que mudarse con su madre después de sufrir una demoledora desilusión en su carrera; otra había pasado la mayor parte de su infancia en el extranjero, cuando durante su Luna Nueva Progresada sus padres fueron repatriados e incluso se mudaron al hogar ancestral. La Luna Nueva Progresada puede significar por tanto, que después de haber viajado lejos y explorado muchas cosas, finalmente volvamos a casa, del mismo modo que nuestros padres lo hicieron, y antes que ellos sus madres. Puede surgir una nueva apreciación de nuestros valores parentales, o podemos descubrir cosas sobre nuestros antecedentes familiares de los que no éramos conscientes con anterioridad. En otro nivel, y quizás el núcleo central, la Luna Nueva Progresada y su tema 'regreso al hogar', trata sobre encontrar nuestro punto de gravedad, que se sitúa en la raíz de nuestra personalidad y nuestro ser interior, el núcleo de nuestra existencia. Volvemos a casa, a nosotros mismos. De este modo, podemos descubrir que las búsquedas que hemos abandonado, o pospuesto durante el último ciclo, encuentran un nuevo significado en nuestra vida. Podemos retomar, de nuevo, ese instrumento musical que ha estado cogiendo polvo durante los últimos diez años o decidir acabar esa educación universitaria que habíamos interrumpido por razones imprevistas.
Si hemos permanecido atascados en nuestros sueños durante mucho tiempo, la Luna Nueva Progresada puede indicar el momento de movernos en un nivel más elevado y encontrar la reafirmación de quiénes somos y cuál es nuestra esencia. El viejo tema adquiere una nueva dimensión, a menudo en forma de un nuevo reto en la carrera profesional. He comparado la Luna Nueva con un tránsito sobre el IC, y cuando esto sucede, el MC se activa también. La Luna Nueva Progresada puede significar por tanto que nuestra situación en la vida ha cambiado. Neil Armstrong, un entusiasta piloto amateur, se unió a la Marina para realizar misiones en Corea; Juan Pablo II se convirtió en Papa. Los Beatles conocieron a Brian Epstein y firmaron su primer contrato discográfico durante la Luna Nueva Progresada de John Lennon. Podemos seguir con lo que hemos estado haciendo hasta el momento, pero en lugar de  jugar para la liga local, en este momento jugamos en una liga mayor, y sin darnos cuenta las reglas del juego han cambiado.

La Luna Creciente Progresada

(45°-89°)

Si el ciclo comienza en el IC, al comienzo de la fase Creciente, nos encontramos a medio camino, por esa parte del ciclo que corresponde a la 5ª casa. La 5ª casa es la casa del Sol, y en esta casa nos expresamos tal y como somos de manera que sentimos y nos convertimos en individuos únicos. En los mitos este es el momento en que el hijo de una virgen se ve incitado a buscar a su padre, mientras en los cuentos de hadas los héroes suelen ir en busca de manzanas doradas o elixires de la juventud, todos ellos símbolos de la energía solar. Y de este modo el héroe decide abandonar el hogar en busca de fama y fortuna, embarcándose en la misión de la búsqueda interior. Del mismo modo, durante la fase Creciente, debemos tomar riesgos para crear nuestra propia historia, y hacer que la pelota ruede. Debemos abandonar el hogar, ir a la escuela, empezar a relacionarnos o traer un hijo al mundo. A veces las circunstancias pueden forzarnos a entrar en acción cuando hubiéramos preferido permanecer pasivos pero el nuevo ciclo debe comenzar y debemos hacernos cargo de la situación.
Por tanto si la fase Creciente sigue al periodo de la Luna Nueva de sueños, desorientación y de holgazanear, la mitad de la cuadratura nos insta a hacer algo. El reto aquí es ponerse en movimiento, aun cuando la dirección y la meta no estén muy claras. Durante esta etapa podemos decidir tomar un trabajo, el que sea, y adquirir experiencia por nuestra cuenta. Debemos empezar nuestro viaje, incluso si no estamos totalmente seguros de dónde el viaje nos llevará, debemos salir de casa.
Si durante la Luna Nueva Progresada sufrimos una depresión, nos quedamos sin trabajo, nos econtramos en un periodo de obscuridad o somos hospitalizados, este puede ser el momento oportuno de resurgir. Si durante la Luna Nueva Progresada redescubrimos un viejo sueño, ahora debemos dar los primeros pasos para hacer realidad ese sueño y quizá empezar a tomar clases de música o clases de administración de empresas. Después del sextil Progresado nos encontramos en esa parte del ciclo que corresponde a la 6ª casa y debemos descubrir que para hacer realidad nuestros sueños tenemos que trabajar duro. Dado que inevitablemente somos nuevos en lo que hacemos durante la fase Creciente, este periodo está caracterizado por una línea de crecimiento ascendente; tenemos que aprender a convivir con una nueva pareja, hacer de padres con unos hijos recién nacidos o desempeñarnos en un nuevo trabajo.
En los cuentos populares esta parte de la fase Creciente corresponde con el momento en que se pide al héroe o heroína que preste un servicio, quizá liberando un animal atrapado o ayudando a una mujer anciana. A veces nuestros protagonistas deben pasar por un periodo de aprendizaje. Nos encontramos en la 6ª casa; debemos trabajar y aprender, adaptarnos y ponernos a prueba. Algunos héroes conocen en este momento a sus mentores que los prepararán para su carrera heroica; es el momento en que el Rey Arturo conoce a Merlín, o Jasón y Aquiles pasan tiempo con Quirón [6].  La moraleja de los cuentos en toda su diversidad es siempre la misma. Si el héroe resulta de ayuda, es diligente y lo suficientemente atento, sus esfuerzos no serán en vano, y él mismo recibirá ayuda, consejo o quizá un amuleto mágico o una espada que le protegerá en las aventuras que le esperan. Sería sensato aceptar en esta etapa la ayuda y la guía ya que podemos adquirir habilidades y experiencias que nos situen en una posición de ventaja más adelante.
Y necesitamos apoyo, ya que durante la fase Creciente, somos jóvenes y no tenemos experiencia en este ciclo. En esta etapa podemos desear formar parte del colectivo, gente con prácticamente nuestras mismas ideas y aspiraciones. Quizá necesitemos del apoyo de un profesor, o de un compañero con mayor experiencia que nos enseñe los engranajes de lo que tratamos de aprender, o mantener los valores parentales mientras tratamos de educar a nuestro niño interior. Es un periodo para tener la mente abierta, ilusionados por experimentar, aprender, adaptarnos y aplazar el juicio personal. Sería sensato prestar atención a nuestra necesidad de estructura y seguridad para proteger lo nuevo. De hecho, debemos crear un entorno seguro y de aprendizaje para nosotros mismos. 
No es una buena idea pararse a reflexionar en este momento, evaluar o analizar nuestras dudas internas ya que no disponemos de la suficiente perspectiva para darnos cuenta de lo válidas que son nuestras experiencias o dónde nos llevarán. Sin embargo, si las circunstancias son las ideales, podemos hacer sorprendentes progresos durante estos años y alcanzar el éxito. John Lennon se encontraba en la fase Creciente Progresada  durante la máxima popularidad de Los Beatles. Sin embargo, que todavía se encontraba en la típica fase Creciente de tocar dentro de un grupo de amigos de la infancia bajo la dirección estricta de Brian Epstein. Su entrada en la siguiente fase - Cuarto Creciente Progresado - no pasaría inadvertida.

El Cuarto Creciente Progresado

(90°-134°)

Durante la fase Creciente salimos del huevo y - apoyados por nuestros padres - experimentamos un rápido crecimiento y adquirimos plumas. Por un momento probamos a mover las alas, flexionando nuestros músculos de vuelo, preparándonos para despegar. Ahora, en el Cuarto Creciente es el momento de volar. Independientemente de nuestra edad o circunstancias, el Cuarto Creciente trae consigo una ruptura con el pasado, el corte del cordón umbilical y una mayor independencia. Cuando llega esta fase, podemos desear dar la espalda a lo que resultaba un entorno familiar pero también restrictivo y experimentar pruebas de fuerza, coraje y juicio. Si miramos al diagrama podemos ver por qué esto es así y qué otros temas podemos experimentar durante el Cuarto Creciente.


Si comparamos la Luna Nueva Progresada con los tránsitos o progresiones sobre el IC, entonces el Cuarto Creciente Progresado es similar a los planetas que cruzan el Descendente. Todos los ciclos pueden ser representados mediante una onda y según mi punto de vista, el diagrama muestra el ciclo lunar - así como del resto de ciclos planetarios - relacionados con los cuatro ángulos de la carta. El punto más bajo y amorfo de la onda y también de la carta es el IC, el punto de medianoche, la semilla proverbial, invisible, oculta en el suelo o en el útero. Siguiendo el cliclo, a la Luna Nueva, le sigue la fase Creciente del ciclo; la onda sube y alcanza su zenit o apoteosis en el punto de mediodía; el MC; el punto más elevado de la carta. Le sigue la parte menguante del ciclo: la onda desciende. Entre la Luna Nueva y la Luna Llena, a mitad de camino de subida, alcanzamos la unión crítica mientras cruzamos el eje Ascendente-Descendente. En este punto abandonamos la esfera inferior de lo privado y entramos en el terreno público del hemisferio superior.
Si hemos recibido apoyo, aun respetando ciertas tradicionesnos sentimos preparados para tomar nuestras propias decisiones, formular nuestras propias filosofías, o decidir nuestros propios métodos. Nos sentimos preparados para iniciar nuestros negocios o, si ya tenemos trabajo, tomar un nuevo desafío y explorar un nuevo mercado o lanzar un nuevo producto. Si hemos estado escribiendo un libro, el Cuarto Creciente es un momento apropiado para enviar el manuscrito a los editores.
Independientemente de lo que ocurra, está claro que durante el Cuarto Creciente tenemos que hacer frente a la competición y el juicio de otros y no hay duda de que para la mayoría de nosotros
es una perspectiva que nos atemoriza. Antes de publicar El Señor de los Anillos, durante su Cuarto Creciente Progresado, J.R.R. Tolkien escribió en una carta a un amigo: "Tengo miedo de la publicación, ya que es imposible que lo que se dice pase inadvertido. He expuesto mi corazón a tiro."[7] Bajo estas circunstancias es natural echar mano de amigos y aliados para no enfrentar al enemigo solos. Si tratamos de manejar la situación sin el apoyo de los padres o figuras parentales nuestros colegas se vuelven más importantes. Durante el Cuarto Creciente necesitamos asociarnos con espíritus gemelos, unirnos a clubes o encontrar compañeros que nos ayuden a lo largo del rito. Desde este punto de vista también observamos cómo a lo largo del tiempo independizarse ha sido - especialmente para las mujeres - sinónimo de casarse; la esposa en muchos sentidos reemplaza al progenitor del sexo opuesto. Las bodas son un evento muy común durante el Cuarto Creciente. La Princesa Diana es un excelente ejemplo ya que su boda durante el Cuarto Creciente proclamó el comienzo de su vida como una figura pública y su rivalidad con Camila Parker. Sin embargo, ya que la tendencia del Cuarto Creciente es la de romper con el pasado para ganar independencia, los divorcios son tan comunes como las bodas durante esta fase. Por supuesto, lo uno no excluye necesariamente lo otro. Cuando John Lennon alcanzó su Cuarto Creciente se divorció de su primera mujer, se casó con Yoko Ono y comenzó su carrera en solitario, acciones todas típicas del Cuarto Creciente.
Si todavía somos muy jóvenes para casarnos, alguien significativo puede aparecer en nuestra vida, en la forma de un hermano cuyo nacimiento pueda significar tanto compañía como nuevas responsabilidades y competir por la atención de la madre. Y dado que la 7ª casa rige tanto los enemigos como los compañeros, nuestro Cuarto Creciente Progresado también significa hacer frente al bulling en el colegio o en el trabajo.
Habiendo dejado la casa para iniciar nuestro viaje heroico, cruzamos las fronteras de lo que nos resulta seguro y familiar y entramos en un terreno extraño y peligroso donde tenemos que hacer frente "al otro" y en el que muchas esperanzas o miedos pueden ser proyectados. La fase de Cuarto Creciente significa tener que ocuparnos de asuntos relacionados con la 7ª y 8ª casas. Caperucita Roja se aventura en el bosque y se encuentra con el lobo. ¿Es éste una figura encantadora o un peligro mortal?. Los héroes se ven abandonados por sus guías o compañeros y deben hacer frente a los peligros solos. Las princesas se casan con La Bestia o Barbazul y se encuentran a si mismas haciendo promesas a un sapo. Los padres se han marchado, y estos personajes ahora deben hacerse sus propios juicios en relación a estas criaturas.
Como ya hemos mostrado en ejemplos anteriores, no todos los Cuartos Crecientes Progresados resultan tan dramáticos. Para muchos niños, puede representar sencillamente el siguiente paso hacia la independencia, con la confianza y el estímulo de sus padres. Algunos podemos decidir no lanzarnos, al menos no en este momento. A diferencia del pájaro al borde del nido que volará o morirá, los humanos podemos decidir si estamos o no preparados. En ese caso la Luna Llena Progresada y el Cuarto Menguante nos recordarán finalmente en qué hemos fallado. No obstante, para la mayoría de los que se aproximan al Cuarto Creciente Progresado, es el momento de tomar aire y confiar en nuestras alas.

La Luna Gibosa Progresada

(135°-179°)

En los años precedentes a la Luna Llena Progresada nuestro mundo se abre a nuevos horizontes. Podemos sorprendernos visitando una gran ciudad o viajando a las montañas por primera vez, o quizá nos adentramos en el mundo de la literatura o alguna forma más elevada de educación; vemos la vida desde otro punto de vista que nos enseña la inmensidad del universo y nos damos cuenta de lo grande que el mundo resulta ahí fuera.
Dentro de los treinta grados que nos llevan hacia la oposición entre el Sol y la Luna Progresados, nos hallamos en la 9ª casa y naturalmente estamos expandiendo nuestros horizontes. En las fábulas y cuentos tradicionales encontramos al héroe que vuela en una alfombra mágica o sobre un pájaro mítico a algún país lejano para completar su misión y, de esta forma, al aproximarnos a la Luna Llena Progresada sentimos la misma clase de excitación. No obstante, en estos lugares lejanos, el héroe puede encontrarse también con gigantes corpulentos y de apetito voraz. Todo crece a lo grande durante la Luna Gibosa, incluidos los problemas y las fuertes emociones.
La fase Gibosa comienza de hecho cuando acaba la fase de Cuarto Creciente: en la 8ª casa. Idealmente durante el Cuarto Creciente la confrontación con "el otro" nos ha transformado. Podemos haber establecido un lazo con esa otra persona especial de modo que ahora seamos más fuertes y completos que antes. Habiendo hecho frente al reto y descubierto nuestros poderes ocultos, podemos elevar nuestra mirada más alto que antes y sentir la atracción del futuro. Multitud de nuevas posibilidades se nos abren ante los ojos y sentimos que podemos alcanzar las estrellas. Literal o simbólicamente sentimos cómo nuestro niño interior crece; una mujer fuerte con su hijo es una imagen idónea para la Luna Gibosa.
Por otro lado, las confrontaciones durante el Cuarto Creciente pueden haber no ido tan bien. Podemos haber sufrido derrotas y traiciones con el resultado de sentirnos traumatizados, frustrados o sin fuerza. Al igual que la mujer de Barbaazul podemos haber encontrado las cabezas sangrantes en la habitación secreta. En este caso nuestra tensión emocional, ansiedad e insatisfacción crecen al tiempo que tratamos de buscar una salida. Mientras la Luna crece, resultará más difícil contener o disimular nuestros sentimientos.
Debido a nuestro entusiasmo o creciente malestar tendemos a exagerar las cosas durante esta fase. Sentimos que nos aproximamos a la cresta de la ola, y deseamos invertir nuestro tiempo, dinero y esfuerzo. Sacrificamos horas de sueño, comemos mucha comida rápida, fumamos demasiados cigarrillos, o nos endeudamos cada vez más. Podemos hacernos cargo de una mayor cantidad de trabajo mientras ascendemos peldaños en la empresa y los niños pueden demandar un exceso de libertad. Para algunos de nosotros pueden ser demasiadas cosas de las que encargarse. Durante esta fase de Luna Gibosa Progresada, Salman Rushdie tuvo que esconderse mientras unos enfurecidos fieles religiosos alcanzaban un estado de extrema agitación por sus Versos Satánicos.
Pueden alcanzarse éxitos iniciales durante este periodo, generalmente con la promesa de algo mayor en el futuro. No obstante, puede haber estallidos de impaciencia, ira o frustración, avisos de un volcán activo. Hacia el final de la fase Gibosa, podemos esperar un hijo, una ruptura emocional o un descubrimiento científico, que la Luna Llena sacará a la luz.

La Luna Llena Progresada

(180°-224°)

En la Luna Llena Progresada alcanzamos el zenit del ciclo lunar comparable con el punto más alto del horóscopo, el MC y la 10ª casa. Sencillamente: durante la Luna Llena experimentamos un clímax o un anti-climax. Habiendo alcanzado la casa de Saturno podemos esperar un logro concreto o un desengaño. Tanto nuestras esperanzas como nuestros miedos pueden materializarse. Si durante la fase Gibosa estábamos embarazados, ahora nuestro bebé ha nacido, sea este un niño real, una producción teatral o una idea nueva. Por tanto, para algunos de nosotros la Luna Llena significa un punto elevado en nuestra vida o carrera; el logro de un sueño. En los cuentos se alcanza la apoteosis cuando las misiones se llevan a término y los fieros dragones son asesinados. La historia del saqueo de Troya es probablemente el mejor ejemplo de tal desenlace. La estatua del caballo gigante cargado de guerreros (Júpiter, 9ª casa, fase Gibosa) da lugar a la victoria final de los Griegos, pero también a la muerte y destrucción de los Troyanos. (Saturno, 10ª casa). Los poetas griegos, de hecho, relatan que dicho evento tuvo lugar durante una Luna Llena.[8]
Nos encontramos en el MC y por tanto expuestos al mundo exterior y a la mirada pública. Sin embargo, esto no necesariamente atrae la buena fortuna o el éxito. Un escándalo puede atraer hacia nosotros la atención no deseada. Podemos hacer frente a las inevitables consecuencias de los excesos durante la fase Gibosa y sufrir de quemaduras y ataques al corazón. Nuestra imprudencia puede dar lugar a un choque o a un accidente, llevándonos a un punto muerto. Sentimos que hemos llegado al límite de nuestra resistencia y huimos de una situación insostenible o simplemente no obtenemos el premio de promoción que habíamos estado esperando, no porque no seamos dignos de él, sino porque no hay suficiente espacio en la cima y a menudo sólo puede haber un ganador. Durante esta fase de Luna Llena Al Gore sufrió la derrota de las elecciones del año 2000 que probablemente esperaba ganar y John Kerry sufríó el mismo destino en 2004.
Éxito o Fracaso, la Luna Llena siempre trae consigo una liberación de energía, mientras experimentamos el alivio de un resultado definido. Debemos darnos cuenta de nuestras propias limitaciones y resignarnos a la situación, tener la sensación de haber escalado la montaña y pasar un rato disfrutando de las vistas. Idealmente, la Luna Llena trae consigo un sentimiento de liberación. Habiendo alcanzado nuestras metas, ahora podemos permitirnos unas vacaciones. Como podemos observar, la Luna Llena es a menudo más tranquila que la excitante pero frenética fase Gibosa. En este momento nuestras luchas han terminado, y podemos observar nuestra situación y logros desde un punto de vista menos apasionado y proponernos nuevos objetivos. A veces, sin embargo, es necesaria una crisis emocional para limpiar el aire primero.
Desinterés y separación son de hecho los temas más significativos durante la Luna Llena. La distancia entre el Sol y la Luna se halla ahora en su máximo y esto puede dar lugar a la polarización de nuestra vida en este momento. Podemos ver las cosas en blanco y negro y querer deshacernos de esa parte de nosotros que es malvada, cruel o destructiva. Deseamos deshacernos de nuestros demonios y dejar atrás nuestra vieja vida tanto como sea posible. Conozco varias personas que decidieron emigrar durante esta fase, otras que sintieron al menos el deseo de dar la vuelta al mundo. El MC está opuesto a la 4ª casa y durante la Luna Llena podemos hallarnos muy lejos de casa. No es extraño que los niños sufran la experiencia del divorcio de sus padres en este punto: Su padre y su madre son ahora mundos separados.
Esta separación definitiva también tiene lugar durante la misión chamánica de la curación y la visión revitalizante. Tras la mortificación o incluso (aparentemente) muerte del cuerpo, el espíritu se libera y es capaz de viajar a otras esferas; puede ascender a los cielos o descender a las profundidades del mundo de los ancestros; en términos astrológicos: ascender o descender a lo largo del eje MC/IC. De hecho, la cresta de la ola según se muestra en el diagrama representa el punto más elevado de iluminación. Durante la Luna Llena tanto la fuerza solar como la lunar se encuentran en su máximo. La Luna está en su punto más visible y dramático mientras refleja la luz del Sol con un efecto máximo, en tanto que el MC es el reino del Sol, el punto de
mediodía donde el Sol alcanza su posición más elevada en el cielo. Con toda esta luz, debemos ver con claridad. Esta es la razón por la que a menudo se dice que la Luna Llena es un periodo para las visiones y revelaciones. Nos encontramos en la cima del mundo, hablando con los dioses. Las misiones religiosas y el fervor espiritual de la novena casa y la fase Gibosa cristalizan ahora en una visión concreta, en la conversión o artículos de fe. Claramente este es el momento en que Moisés recibe los Diez Mandamientos en el Monte Sinaí o en que Cristo es crucificado en el Gólgota. De acuerdo con la leyenda, también durante una Luna Llena Siddharta se liberó a sí mismo de todas las ilusiones mundanas y se convirtió en Buda.
Para algunos de nosotros la impresión que experimentamos durante la parte final de la fase Gibosa y el comienzo de la Luna Llena puede ser de tal inspiración que encontramos nuestra vocación o la dirección de nuestra carrera. Durante la primera Luna Llena Progresada un Neil Armstrong de seis años montó en un pequeño avión y se enamoró del espacio y de volar. Su segunda Luna Llena, treinta años después, le llevó al espacio exterior a bordo de la misión Géminis 8, muy lejos de casa de hecho.

La Luna Diseminada Progresada

(225°-269°)

En la fase Diseminada a menudo se aprecia el tema 'vuelta a casa' que caracteriza la segunda mitad del ciclo. Mientras que durante la primera mitad hemos estado ocupados en abandonar el hogar y liberarnos del pasado, después de la Luna Llena debemos regresar, trayendo con nosotros, no obstante, nuestra experiencia y percepciones de cambiar y mejorar la situación o el lugar del que provenimos. En este sentido revivimos el pasado y lo cambiamos al mismo tiempo.
Nos encontramos en la 11ª y 12ª casas y el resultado de la Luna Llena debe sin embargo ser asimilado por el colectivo. Debemos compartir nuestras iluminaciones y éxitos con otros. Este es el momento en que Moisés descendió la montaña con las tablas de piedra y se las entregó a la gente. De forma similar, si hemos pasado un año en la India con nuestro Gurú, ahora debemos regresar a casa y utilizar nuestro cambio de actitud en un nuevo trabajo. Nuestro año sabático o embarazo ha pasado y regresamos a la rutina familiar. También podemos dar forma al logro alcanzado durante  la Luna Llena:
podemos llevar nuestro diploma al mercado laboral  o utilizar nuestro premio para financiar el próximo proyecto. Neil Armstrong siguió sus vuelos espaciales para convertirse en el Primer Hombre en pisar la Luna. Su comentario sobre que el pequeño paso que daba se convertía en un gran paso para la Humanidad expresa bien el sentimiento de la Luna Diseminada (o casa 11ª)
Si la Luna Llena trajo consigo la desilusión y la caída, esta fase significa a menudo que estamos intentando llegar a un acuerdo con los hechos. El sentido de indiferencia y cristalización de la última parte de la Luna Llena continúa durante la fase Diseminada y podemos pasar tiempo reflexionando en lo que sucedió, evaluar nuestras acciones, lamer nuestras heridas y llegar a nuestras propias conclusiones. Si hemos encontrado una vocación, es el momento de ponerla en acción. Esto significa que ahora encontramos nuestro sitio o lugar en la sociedad. Podemos unirnos a un movimiento o partido político o buscar nuestros espíritus afines. Un McCartney de 15 años, por ejemplo, se unió a los Beatles durante esta fase. Podemos empezar a construir redes para promover nuestra nueva causa.
Par algunos el retorno después de los hechos heroicos y el gran drama de la Luna Llena es incluso un reto mayor que el viaje de ida. La aventura de Ulises comienza en realidad después del exitoso saqueo de Troya, y tiene que vencer numerosos peligros mientras navega a través de un mar onírico de muchas preocupaciones (12ª casa).Hoy en día los veteranos de guerra experimentan las mismas frustraciones y dificultades a la vez que se sienten perdidos y alienados al regresar a casa después de haber vivido experiencias extremas y luchado en tierras lejanas. De hecho sienten que no han regresado en realidad al hogar, sino que todavía están lejos en espíritu.
Aquellos que durante la Luna Llena huyeron de lo que parecían problemas infranqueables pueden encontrarse a sí mismos huyendo, incapaces o no queriendo afrontar los problemas que dejaron atrás. Otros pueden sentirse bastante cómodos al servicio de las causas elegidas. Nuestros trabajos e instituciones pueden proporcionarnos un sentimiento de identidad colectiva que nos protege como una manta caliente. Durante el proceso de reintegración, típico de la fase Diseminada, podemos añadir más y más agua al vino de nuestras convicciones de la Luna Llena y de hecho correr el peligro de olvidar lo que conocíamos anteriormente con tanta claridad.
En los cuentos podemos reconocer estos temas de la 12ª casa cuando leemos sobre el exilio del héroe, quizá aprisionado, tal vez errante, o quizá bastante confortable y feliz como la Bella Durmiente o los hombres de Ulises que visitaron a aquellos que se alimentaban de lotos, y drogados por las flores que sabían a miel, olvidaron que tenían que regresar a casa. De modo similar, esos espíritus que han transcendido su existencia mundana y alcanzado el Nirvana, pueden decidir no volver a reencarnarse.
La fase Diseminada puede por tanto ser un periodo bastante tranquilo en que nos escondamos, no desarrollemos nuestro potencial y tratemos de olvidar. En dicho caso, la Luna Menguante sonará como  una alerta inaplazable.

La Luna Menguante Progresada

(270°-314°)

La Luna Mengunante Progresada puede compararse con los tránsitos o progresiones por el Ascendente (ver diagrama). Esto significa que nos movemos desde la 12ª casa colectiva y pública hasta la extremadamente personal 1ª casa. La Luna Menguante puede resultar tan dolorosa como el nacimiento; hemos abandonado el útero, despertado de un largo sueño y afrontamos quiénes somos, sólos y como seres separados. Esta crisis puede compararse también con la aleccionadora experiencia de la jubilación, en la que de repente ya no formamos parte del colectivo y hemos perdido nuestra identidad pública, social y corporativa. Es el momento de regresar a nuestro ser esencial. La Luna Menguante se corresponde con las tres primeras casas; los bloques principales que constituyen nuestra personalidad.
Durante la Luna Menguante Progresada surgen preguntas urgentes sobre quiénes somos, lo que deseamos y cómo vemos nuestro destino. Ejemplos de estas preguntas son:
-"En realidad deseo tener un hijo antes de ser demasiado viejo, pero ¿seré lo suficientemente fuerte para criarlo yo mismo?"
-“Lo que realmente deseábamos hacer y experimentábamos antes,dentro de unos años, ¿nos casaremos, estableceremos y crearemos una familia? ”
-“Lo he estado posponiendo pero quiero crear mi propio negocio. Sin embargo, ¿debería hacerlo en este momento en que la economía está a punto de entrar en recesión?”
Durante la Luna Menguante deberíamos sacudirnos de encima muchas distracciones, enfocarnos en volver a ser nosotros mismos. En los cuentos se narra el regreso del héroe. Para aquellos que han estado a la deriva, escondiendose o en el exilio, es el momento de regresar a casa, deshacerse de los tiranos y usurpadores y reclamar su legado.
Cuando, tras haber recorrido los mares durante muchos años, Ulises  regresa a su Ática natal, se encuentra sólo, desamparado, e irreconocible. Debe probarse a sí mismo que él es el rey correcto y gracias a sus hazañas y fuerza reclamar su esposa y su trono.
Un equivalente actual sería el caso bien conocido de Nelson Mandela, quien, después de pasar cerca de treinta años en prisión fue liberado durante su Luna Menguante Progresada, haciendo frente al reto de convertirse en el primer presidente negro de Sudáfrica.
Al igual que la fase Creciente, la fase Menguante puede traer consigo tests de fuerza y coraje y especialmente, para la gente joven la Luna Menguante puede ser muy similar a la experiencia de la Luna Creciente: ambos pueden significar un paso hacia una mayor independencia y autorrealización. (De hecho, en cada fase del ciclo podemos vernos confrontados con asuntos relacionados con la casa opuesta a la que nos encontramos en la actualidad.) Sin embargo, hay diferencias. Como hemos visto en los ejemplos citados anteriormente, nuestras preocupaciones durante la fase Menguante están más relacionadas con el futuro que con el pasado. Durante la fase Creciente solemos preocuparnos de estar preparados; en la fase Menguante tendemos a temer haber dejado las cosas hasta muy tarde. Sentimos que hemos partido en invierno o a una edad avanzada. Otra diferencia que podemos observar a veces es que durante la fase Menguante el espíritu rebelde, característico de ambas fases, no se dirige tanto contra nuestros antecedentes familiares, padres, mentores etc. (casas 4-6) sino contra el colectivo; la historia o la sociedad en general (casas 10-12). Durante su Luna Menguante Progresada Mohammed Ali cambió de nombre y religión desafiando la historia de los negros en America, y se forjó así una nueva identidad para sí mismo.
Durante la fase Menguante se nos recalca con fuerza el hecho de que el ciclo está a punto de llegar a su fin. Podemos sentir que tenemos que volvernos de acero para anticiparnos a la crisis, o que se nos ofrece una última oportunidad de hacer un sueño realidad; en la mayoría de los casos, por tanto, la fase Menguante nos incitará a la acción.

La Luna Balsámica Progresada

(315°-359°)

Mientras la Luna Progresada se aproxima a la conjunción con el Sol progresado, nuestro mundo se contrae. La gente que nos apoyaba o las estructuras que nos proporcionaban un sentimiento de seguridad e identidad pueden caer, dejándonos solos y vulnerables. Los sueños que nos sostenían pueden tener que ser abandonados o pospuestos de forma indefinida. Nuestros planes pueden verse frustrados, o fallar nuestros esfuerzos. Nuestra salud física puede deteriorarse y necesitar de cuidado extra y atención. Y de este modo debemos volvernos hacia dentro, retirarnos y recuperarnos antes de estar preparados para adentrarnos de nuevo en el mundo después de la conjunción, durante la Luna Nueva y la fase Creciente. La Luna Nueva Progresada que se aproxima representa el invierno de nuestro descontento, en que debemos tumbarnos, e hibernar hasta que la luz y la vida vuelvan de nuevo. La Luna Balsámica Progresada, que nos guía en este momento, puede ponernos a prueba severamente; Vincent van Gogh sucumbió a una debilidad física, una enfermedad mental y se desesperó durante esta fase. Muhammad Ali fue despojado de su título mundial y se le negó practicar boxeo al declararse objetor de conciencia por razones religiosas. Sin embargo, la Luna Balsámica Progresada no tiene por qué ser siempre tan extrema.
Aunque podemos vernos forzados a algunas de estas pérdidas y finales, otros escenarios son posibles. Durante el ciclo que está próximo al final, nos hemos visto confrontados con numerosos desafíos, algunos de los cuales podríamos haber evitado. En el último momento, sentimos "es ahora o nunca" y podemos decir adiós a las muletas emocionales, miedos y frustraciones. Es un momento idóneo para deshacernos de las actitudes negativas e inhibiciones que nos mantienen conectados al pasado. De hecho, ya que nos sentimos menos rígidos nos puede faltar la energía para mantener nuestras inhibiciones y defensas y descubrir que podemos liberarnos de ellas. A menudo, se produce un arrepentimiento por no haberlo hecho antes. Esta fase puede ser el momento en que finalmente admitamos nuestros verdaderos sentimientos o problemas. Después de muchos años podemos declarar nuestro amor y comprometernos en una relación o hacer frente a cicatrices internas y buscar consuelo y curación.
Durante esta etapa de nuestra vida aceptamos limpiar  "el mostrador" para el nuevo ciclo. Es importante que busquemos las palabras exactas para decir lo que ha permanecido mucho tiempo sin decir, o las palabras que encapsularan la esencia de nuestras experiencias pasadas. Después de todo, esta parte del ciclo corresponde a la 3ª casa. Nuestras últimas palabras, para cualquier persona o de cualquier situación adquieren una importancia extrema. Tal vez deseemos escribir nuestras memorias o sintamos que necesitamos expresar nuestras emociones a un analista. La antología de los Beatles, un documental de TV de 10 horas de duración realizado en 1995, en el cual los Beatles contaban su propia historia, se hizo cuando tanto McCartney como Ringo Starr pasaban por la fase Balsámica. Pueden que sintamos profundas intenciones o creencias que necesitamos expresar. Es interesante añadir que las famosas citas de Winston Churchill sobre la guerra (Ej. 'Les combatiremos en las playas' o ' Nunca en el campo de batalla un conflicto humano se debió tanto a tan pocos') se hicieron durante su Luna Balsámica Progresada. Especialmente la segunda vez que esta fase tiene lugar, podemos sentir que tenemos un montón que cosas que decir. Demetra George y Dana Gerhardt asociaron la 'Luna Negra' con la vieja bruja o la sabia. Las mujeres mayores pueden haber trabajado duro o  criado a sus hijos, pero les cuentan a los niños historias y cuentos de hadas que contienen las semillas de la sabiduría para que pasen de generación en generación. Durante la Luna Balsámica, podemos desear representar ese papel.
Una de las imágenes utilizadas para referirse a la Luna Balsámica es la de la fruta madura y podrida que cae al suelo y suelta la semilla. Dado que nos estamos deshaciendo de todo lo superfluo, quedamos reducidos a nuestra esencia. Se eliminan los bloqueos, los asuntos se solucionan, y todo empieza a encajar. Esto significa que la fase Balsámica llega en un momento en que hacemos las cosas apropiadas y conocemos a la gente adecuada, esas cosas y gente, que de hecho son esenciales para nosotros. En esta etapa de nuestra vida, sentimos que es preferible conservar nuestra energía, de modo que podamos
enfocarnos tan sólo en unas pocas actividades. Sin embargo, puede faltarnos la fuerza, convicción y recursos para seguir adelante. Van Gogh desarrolló su estilo expresionista único, y alcanzó la cima de sus poderes artísticos, aunque sin dinero, aislado del mundo, y físicamente debilitado, no pudo ver la luz al final del túnel. La semilla es pequeña y vulnerable, y debemos protegerla contra turbulencias provenientes de la Luna Nueva. Los proyectos y relaciones iniciados durante la fase Balsámica pueden por tanto experimentar una crisis temprana. Una vez que nuestra relación o proyecto hayan sobrevivido a este test, se volverá más fuerte y resistirá el siguiente ciclo.
Los ejemplos mencionados anteriormente, pueden no resultar muy esperanzadores, pero a veces experimentamos el aspecto más gratificante de esta fase. La segunda parte del Ciclo Lunar está asociada, después de todo, con 'recoger lo que has sembrado' y durante la fase Balsámica la cosecha puede estar bien madura. Las recompensas y reconocimiento que hemos estado esperando durante mucho tiempo, llegan finamente. Los sueños que se han mantenido durante tanto tiempo se vuelven realidad, mientras nuestros ahorros se hacen efectivos y se completan los proyectos a largo plazo. Eleanor Roosevelt vió La Declaración de Derechos Humanos aceptada por la ONU durante su Luna Balsámica. Este puede ser el momento en que realmente profundicemos en nosotros mismos. Nelson Mandela se convirtió en Presidente de una Sudáfrica libre de Apartheid. Winston Churchill se convirtió en el líder durante la guerra, un trabajo para el que sentía que se había estado preparando toda su vida. Cinco años después, durante su Luna Nueva Progresada, pudo celebrar la victoria sobre Hitler y el trabajo de toda una vida estaba hecho. Incluso cuando la Luna Balsámica nos pone en bandeja la recompensa final, el futuro y los cambios de la Luna Nueva no están nunca muy lejos.

El retorno de la Luna Nueva

Durante la Luna Nueva Progresada podemos volvernos totalmente hacia dentro. El Sol y la Luna, los dos luminares y cuerpos más poderosos en nuestra carta se unen. Y donde antes espíritu y alma, mente y cuerpo, masculino y femenino, identidad y raices habían estado separados, ahora se unen en uno. A lo largo de las fases Balsámica y Luna Nueva nos vemos forzados a sacar a la luz esas partes de nosotros que hemos proyectado sobre el mundo y es posible reintegrarlas en la personalidad. Para algunos esto puede significar tener que escarbar profundamente dentro del subconsciente para rescatar partes de nosotros mismos que habíamos olvidado. Algunos tienen que atravesar un proceso de duelo para interiorizar aquello que perdieron. La conjunción Sol-Luna progresada puede representar una experiencia de muerte y renacimiento similar a los pesados tránsitos de Plutón. Para algunos, la conjunción es menos dramática, simplemente les permite poner los pies en la tierra, regresar a la fuente y aventurarse de nuevo, a veces con un vigor incrementado. Otros, sin embargo, pueden desear deshacerse de todos los obstáculos y alcanzar su destino y la culminación de sus ambiciones. Pueden experimentar su mejor momento durante las fases Balsámica y Luna Llena, incluso cuando el canto del cisne anuncie el inexorable y no distante final.
* * *
Datos de Cartas , Biografía y Fuentes: (por orden alfabético)
Edwin "Buzz" Aldrin, 20 de Enero de 1930; 2:17 p.m. EST; Glen Ridge, NJ, USA (40°N48, 74°W12); AA: certificado de nacimiento - Lynne Koiner. La llegada del hombre en la Luna sucedió el 20 de Julio de 1969. Aldrin fue hospitalizado por depresión en Octubre de 1971. (biografía de AstroDatabank por Lois Rodden).

Muhammad Ali, 17 de Enero de 1942; 6:35 p.m. CST; Louisville, KY, USA (38°N15, 85°W46); AA: Certificado de nacimiento - Steinbrecher. Ali anunció que se había convertido al Islamismo Negro poco después de haber ganado el título de peso pesado de boxeo el 25 de Febrero de 1964. Su título fue revocado en 1967 WWW.AFRICANAMERICANS.COM/MUHAMMADALI.HTM

Neil Armstrong, 5 de Agosto de 1930, 12:31 a.m. EST; Washington, OH, USA (40°N34, 84°W12); AA: Lois Rodden cita el certificado de nacimiento que proporciona Washington township en  Auglaize County. Armstrong obtuvo su licencia como piloto privado el 5 de Agosto de 1946 (su 16º cumpleaños). Fue aviador de la Marina desde 1949 hasta 1952 (biografía de AstroDatabank). La misión Gemini 8 se llevó a cabo el 16 de Marzo de 1966; el aterrizaje en la Luna, el 20 de Julio de 1969 (news media).

Winston Churchill, 30 de Noviembre de 1874; 1:30 a.m. GMT; Woodstock, Inglaterra (51°N52, 01°W21); B: John Addey cita la carta del padre, a las 1:30 a.m. Las famosas citas de Churchill fueron hechas en 1940 y 1941: "Les combatiremos en las playas" el 4 de Junio 4 de 1940;"Nunca… se debió tanto a tan pocos" el 20 de Agosto de 1940 (www.winstonchurchill.org).

Bill Clinton, 19 de Agosto de 1946: 8:51 a.m. CST: Hope, AR, USA (33°N40, 93°W36); A: de memoria; nota a mano de Mrs. Virginia Kelly, madre de Clinton, a Shelley Ackerman con la hora escrita a mano. El escándalo de Mónica Lewinsky estalló en Enero de 1998 (news media).

Diana, Princesa de Gales, 1 de Julio de  1961; 7:45 p.m. GDT; Sandringham, Inglaterra (52°N50, 00°W30'); A: Charles Harvey cita los datos de su madre. Diana se casó con el Príncipe Carlos el 29 de Julio de 1981 (news media).

John Lennon, 9 de Octubre de 1940; 6:30 p.m. GDT; Liverpool, Inglaterra (53°N25, 02°W55); A: Lois Rodden cita a la madre adoptiva, Pauline Stone, por correspondencia "de la tía de Lennon que estuvo presente en el nacimiento." Brian Epstein conoció a la banda en Noviembre de 1961 y firmó con ellos dos meses después. Lennon se divorció de Cynthia Powell el 8 de Noviembre de 1968 y se casó con Yoko Ono el 20 de Marzo de 1969. Su primer álbum en solitario Imagine se lanzó en 1970 (Frank C. Clifford, British Entertainers, 3rd edition, Flare Publications, MPG Books, 2003, pp. 31, 32).

Nelson Mandela, 18 de Julio de 1918; 2:54 p.m. EET; Umtata, Sudáfrica (31°S35, 28°E47); DD: conflicto de fuentes, rectificado por Noel Tyl. Mandela fue excarcelado el 11 de Febrero de 1990 y juró como presidente el 10 de Mayo de 1994(news media). Aunque los datos de nacimiento de Mandela resultan sospechosos, las lunaciones progresadas nos permiten un amplio margen de error - en este caso, más de 24 horas a cada lado de la hora citada.

Paul McCartney, 18 de Junio de 1942; 2:00 p.m. GDWT; Liverpool, Inglaterra (53°N25, 02°W55); A: Nalini Kanta Das (Tom Hopke) cita a Linda McCartney como fuente. McCartney debutó en la banda de  Lennon el 18 de Octubre de 1957 y dejó los Beatles el 9 de Abril de 1970 (Clifford, British Entertainers, pp. 31, 32).

Papa Juan Pablo II, 18 de Mayo de 1920; 5:30 p.m. EET; Wadowice, Polonia (49°N53, 19°E30); A: Grazia Bordoni lo cita en la TV Italiana. El Cardenal Wojtyla fue elegido papa el 16 de Octubre de 1978 (news media).

Eleanor Roosevelt, 11 de Octubre de 1884; 11:00 a.m. EST; New York, NY, USA (40°N42, 74°W00); AA: certificado de nacimiento - Joan Negus. La ONU adoptó la Declaración Universal de los Derechos Humanos el 10 de Diciembre de 1948 (www.un.org/Overview/rights.html).

Salman Rushdie, 19 de Junio de 1947; 2:30 a.m. IST; Bombay, India (18°N58, 72°E50); A: Catriona Mundle cita "aproximadamente 2:30 a.m., quizás un poco antes" (AstroDatabank). La fatwa se declaró el 14 de Febrero de 1989 (news media).

Ringo Starr,  7 de Julio de 1940; 12:05 a.m. GDT; Liverpool, Inglaterra (53°N25, 02°W55); A: Lynne Palmer cita los mismos datos que H. Davies in The Beatles, "poco después de medianoche."

Margaret Thatcher, 13 de Octubre de 1925; 9:00 a.m. GMT; Grantham, Inglaterra (52°N55, 00°W29); A: Charles Harvey cita a la secretaria privada. Thatcher dimitió como Primera Dama el 22 de Noviembre de 1990 (news media).

J. R. R. Tolkien, 3 de Enero de 1892; entre 8:00 p.m. y medianoche LMT; Bloemfontein, Sudáfrica (29°S12, 26°E07); DD: Humphrey Carpenter cita una cata del padre con la hora aproximada en J. R. R. Tolkien, A Biography, 1977, p. 12. Otras fuentes citan otras horas. El Primer Volumen de la Comunidad del Anillo se publicó el 29 de Julio  de 1954 (The Letters of J. R. R. Tolkien, ed. H. Carpenter, HarperCollins, 1995, p. 183).

Vincent van Gogh, 30 de Marzo de 1853; 11:00 a.m. LMT; Zundert, Holanda (51°N28, 04°E40); AA: certificado de nacimiento - Steinbrecher. Van Gogh se disparó el 27 de Julio de 1890 y murió el 29 de Julio (www.vangoghgallery.com/misc/bio.htm).

Bibliografía:
 
Busteed, Marilyn and Dorothy Wergin. Phases of the Moon. American Federation of Astrologers, 1996.
Campbell, Joseph. The Hero with a Thousand Faces. Fontana Press, 1993.
Costello, Darby. The Astrological Moon. CPA Press, 1996.
George, Demetra. Mysteries of the Dark Moon. HarperCollins Publishers, 1992.
George, Demetra. Finding Our Way through the Dark. ACS Publications, 1994.
Propp, Vladimir. Morphology of the Folktale. University of Texas Press, 1988.
Rudhyar, Dane. The Lunation Cycle. Shambhala, 1975.


Notas:
  1. The Mountain Astrologer, Oct/Nov 2001 – Feb. Marzo 2003.
  2. Progresar un día por año. Estas progresiones muestran para alguien de 40 años, las posiciones del Sol, la Luna y los planetas, 40 días después de su nacimiento.
  3. Prefiero comparar las fases lunares con las casas astrales en lugar de con los signos. El signo de la mitad del invierno es Capricornio en el Hemisferio Norte, y Cáncer en el Hemisferio Sur, mientras el IC representa siempre el punto de medianoche con independencia del signo que lo ocupe.
  4. Leer los siguientes ejemplos de lo que sucedió en realidad durante estas fases. Es importante tener en mente que estas fases Lunares Progresadas no son indicadores exactos; los tránsitos y progresiones sobre los ángulos y otras posiciones natales son dispositores más fiables. Tampoco puede afirmarse con exactitud a partir de un evento en qué fase se encuentra una persona. Las experiencias de aprendizaje pueden acontecer en cualquier punto del ciclo, y lo mismo se aplica para bodas y muertes. Todos los ejemplos citados deben por tanto ser observados en un contexto más amplio del ciclo.
  5. El tema del regreso al hogar está presente a lo largo de toda la segunda mitad del ciclo lunar, pero es más pronunciado entorno a la conjunción progresada.
  6. La 6ª casa se refiere a las tías, tíos y mentores. Consultar Steve Forest, “The Case of the Disappearing 6th house” in The Mountain Astrologer, Junio/Julio 2002, p. 9-16.
  7. J.R.R. Tolkien, The Letters of J.R.R. Tolkien, editado por Humphrey Carpenter, HarperCollins, London, 1995, p.172.
  8. Robert Graves, The Greek Myths, Combined Edition, Penguin, London, 1992, p.696

http://www.astro.com/astrologia/in_progmoon_s.htm



jueves, 14 de enero de 2016

Ensayo sobre la lucidez. De José Saramago.










Durante las elecciones municipales de una ciudad sin nombre, la mayoría de sus habitantes decide individualmente ejercer su derecho al voto de una manera inesperada. El gobierno teme que ese gesto revolucionario, capaz de socavar los cimientos de una democracia degenerada, sea producto de una conjura anarquista internacional o de grupos extremistas desconocidos. Las cloacas del poder se ponen en marcha: los culpables tienen que ser eliminados. Y si no se hallan, se inventan. Los protagonistas de esta nueva novela de Saramago, un inspector de policía y la mujer que conservó la vista en la epidemia de luz blanca de Ensayo sobre la ceguera, dan muestras de la altura moral que los ciudadanos anónimos pueden alcanzar cuando deciden ejercer la libertad. Saramago, un escritor que se ha convertido en la conciencia lúcida de una época cegada por los mecanismos del poder, lanza una llamada de alerta: «Puede suceder que un día tengamos que preguntarnos Quién ha firmado esto por mí». Ese día puede ser hoy.

 http://www.fiuxy.net/ebooks-gratis/3855933-ensayo-sobre-la-lucidez-jose-saramago-epub-pdf-mobi-opf-mg.html

Lo podeis descargar aquí :

http://www.csocasablanca.org/IMG/pdf/saramago.pdf



El Sol y la Luna en las familias. Por Erin Sullivan.








La astrología no se basa en el sexo de la persona

La astrología no se basa en el sexo de la persona. Los planetas no son energías discretas que nos mueven a hacer cosas, ni tienen género sexual según lo entendemos como masculino y femenino. Masculino y femenino no necesariamente se refieren siempre a hombres y mujeres. Si dichas afirmaciones son ciertas, no podemos afirmar, 'El Sol es masculino yla Luna femenina, por lo tanto, el Sol es  nuestro padre arquetípico yla Luna es nuestra madre arquetípica.' La conclusión  astrológica común a la que hemos llegado se  basa en la agrupación de fragmentos de información seleccionada a través de los ojos e interpretada por las mentes de acuerdo a la forma de pensar de un determinado momento de la historia. Se suele pensar que los mitos surgen espontáneamente en las culturas y que tienen misteriosos paralelismos con otras mitologías incluso cuando dichas culturas  nunca hayan interactuado o que dichos mitos culturales surgieron en culturas no contemporáneas. Existen numerosos mitos culturales pre-griegos y otros que tienen diosas del cielo y heroínas solares así como dioses-Lunares e imágenes lunares masculinas.
Parece ser que los astrólogos somos los responsables de forzar e idear las interpretaciones de los mitos para hacerlos más manejables para nosotros. A menudo, esto funciona, especialmente si tomamos un mito como alegórico, pero en algunos casos puede llevar a malos entendidos, especialmente si las historias tienden hacia un género masculino o femenino, lo que a su vez será inevitablemente traducido como 'madre' o 'padre' o 'hija' o 'hijo'. En un libro de astrología basado en las familias, tenemos que ser escrupulosos para no asignar de manera arbitraria géneros estrictos a los cuerpos planetarios, así como tratar de buscar relaciones entre los arquetipos masculino y femenino y percibir como dichos papeles se actúan en la dinámica familiar entre todos sus miembros, y como se transmiten a través de los individuos de la familia, con independencia de su género.
Con respecto a los símbolos, Sol y Luna, en la carta, debemos ser incluso más cautelosos para no estereotipar o restringir su simbolismo. Resulta muy sencillo asignar papeles parentales a cada uno de ellos ya que disponemos de mucho material que se adapta perfectamente  - y existen razones simbólicas de quela Luna se acerca más a la línea maternal y el Sol a la línea paternal, pero no debido a que el Sol  yla Luna sean respectivamente masculino y femenino. Sin embargo, debemos recordar que los orígenes de la asignación del género masculino al Sol y del femenino ala Luna son arcaicos, y desde dichos orígenes, nuestras interpretaciones astrológicas han sido extrapoladas y superpuestas con dicha información.


La primera consideración antes de profundizar en el simbolismo de los luminares es que ninguno de ellos por su simbolismo está limitado a uno u otro progenitor. Relegar el Sol al padre yla Luna a la madre en el mejor de los casos simplifica el simbolismo y en el peor distorsiona completamente nuestra plena comprensión de la persona. Sin embargo - y esta es una razón de peso - es muy probable que debido a estos estereotipos, nos identifiquemos más con uno de los dos progenitores. Es decir, podemos encontrar que nuestra madre sea más lunar que nuestro padre y viceversa, o que nuestra naturaleza lunar esté más influida y representada por nuestra madre y el carácter solar más realzado y personificado por nuestro padre. Entonces, basados en la interpretación del Sol yla Luna tradicionales, decimos que nuestra madre se corresponde con la Luna y nuestro padre con el Sol. A partir de esto, interpretamos nuestras cartas, o peor, las de otras personas, de esta manera. Todos los aspectos Lunares nos hablan de cómo era nuestra madre y todos los aspectos solares definen nuestro legado paterno. Conociendo esta tendencia, debemos incluir en nuestro propio juicio la condición de nuestra relación interna con el mundo exterior- somos más un producto de nuestra civilización y de un rol establecido. Existe una profunda conspiración entre lo que proyectamos y lo que recibimos. Tiene sentido entonces familiarizarnos con la doctrina Luna/madre y Sol/padre. Yo, personalmente, lo he hecho, y seguiré pensando que es apropiado y se ajusta en la mayoría de los casos, en el nivel arquetípico.
Sin embargo, no tenemos por qué seguir esta dinámica al pie de la letra. Podemos ampliar nuestra visión e incorporar la posibilidad de que el Sol yla Luna representen a nuestros progenitores en el sentido más arquetípico. Cómo los arquetipos de la Gran-Madre y el Padre-Héroe son representados por madres y padres y experimentados por cada persona es donde la interpretación creativa debería permitir un mayor grado de la expresión solar o lunar. Es decir, son los símbolos de los diferentes modos en que aumentamos nuestra conciencia de ser quienes somos, las imágenes a través de las cuales podemos dibujar los modos en que experimentamos nuestra innata y colectiva humanidad. El Sol yla Luna representan el matrimonio arquetípico y cómo nos emparejamos internamente está relacionado con la díada Sol/Luna en nuestro horóscopo. Cómo intermediamos en las polaridades dentro de nuestra psique y mente está representado por la relación solar-lunar. Por ejemplo, la gente con una oposición Sol/Luna tiende a la división y a personalidades mediadoras. Experimentan la dicotomía más intensamente, y tienden a manejar los problemas mediando por ambos lados, disponen de una conciencia innata de las diferencias entre los asuntos masculino y femenino; mientras que, digamos, la gente con un trígono Sol/Luna tienden a tener una visión idealizada de los "padres arquetípicos" inherente dentro de su psique, y por tanto no están preparados para tratar con las posibles dificultades intrínsecas de la polaridad entre lo masculino y lo femenino.
La díada Sol/Luna es esencial para entender la bipolaridad y las opciones, diferencias y distinciones entre experimentar las mismas cosas de diferentes modos - en otras palabras, cuando ocurre un suceso, éste sucede en muchos, muchos niveles, y la díada Sol/Luna representa [de un modo simple], un modo de entender dos niveles de experimentar el mismo suceso.
Dane Rudhyar era muy claro en el principio Sol /Luna de unidad en la dualidad:  El Sol y Luna astrológicos son compañeros, pares, una pareja, como en una relación. Su libro, El Ciclo de la Lunación fue un adelanto en la síntesis de la astrología. Nos aclaró que los planetas no existen de forma aislada, sino que están relacionados entre sí en todo momento. El significado del ciclo solar-lunar se basó en sus ciclos crecientes y menguantes. Las leyes naturales de esta relación fluctúan en todo momento, de un modo manifiesto y sutil.
Ha habido muchas teorías sobre el ciclo de lunación natal y la relación paternal, por ejemplo: el Sol yla Luna en oposición significan que los padres estaban en discordia o mejor dicho, eran diametralmente opuestos en sus creencias. Extrapolando, se interpreta en la carta natal como un efecto de 'división' psicológica producido por la polaridad de los padres (por las imágenes paternales del Sol yla Luna), los lados masculino y femenino del individuo no se encuentran al unísono. Bueno, ¿y cuándo sí?, en contadas ocasiones, y cuando lo están, un sentimiento de perfecta harmonía interior es el resultado. Si esto es una consecuencia o no de la influencia directa de la madre y el padre de uno, es totalmente especulativo. Que es el resultado de cómo somos innatamente y como percibimos a nuestros padres se acerca más a la realidad. Qué luminar, el Sol o la Luna, representa mejor a la madre y cuál al padre puede variar de muchas maneras diferentes a lo largo de nuestras vidas. Regresamos de nuevo a la dialéctica entre naturaleza y nutrición.
Hay características predominantemente lunares y otras solares- si consideramos diversos aspectos significativos de las fuerzas que motivan nuestra vida, por ejemplo: la conciencia, los hábitos, la responsabilidad; relacionarse; el desarrollo del ego; la creatividad, etc., podemos echar un vistazo al Sol y la Luna y encontrar el modo en que cada uno de estos luminares han representado sus papeles en la forma dominante en que alcanzamos el resultado final de cada uno de esos componentes individuales que constituyen el carácter.

Unidad en la Dualidad

El Sol y la Luna contribuyen por igual a nuestra capacidad para tener reacciones y crear patrones de vida de diversas maneras. La siguiente lista comprende un corto inventario de los aspectos más significativos en que el Sol y la Luna contribuyen a nuestro carácter:
  1. conciencia
  2. hábitos
  3. responsabilidad
  4. relacionarse
  5. desarrollo del ego
  6. creatividad
He aquí una lista de las palabras claves asociadas a los luminares al contemplar el horóscopo. No se tratan de definiciones de cada cuerpo. Todos disponemos del Sol y la Luna, y de dos padres... los sentimientos asociados con ellos pueden ser combinados o diferenciados.
SOL LUNA
logos - nombre/palabra ennoia - semilla, idea
nomos - ley physis - naturaleza
social instintivo
consciente inconsciente
ego id
tradición 'ahora', presente, actual, urgente
estructural espontáneo
civilizado animal
pensamientos ser
ideas irracional, no racional
significado esencia
libido eros
deseo deseo / trascendencia
celestial (sistema solar) chthonic (Luna - Tierra)
regulado, constante calibrado, en fases
cerebral visceral
orden caos
democrático anárquico
objetivo subjetivo
individual / cultural colectivo / global
El Sol y  su sistema

El Sol es el centro del sistema solar, y en la familia de planetas actúa exactamente de este modo. Tiene grandes expectativas de los otros, y  por sí mismo, el Sol es la figura con más fuerza del horóscopo. El Sol representa cómo nuestra fuerza vital fue recibida en la familia y cómo nuestro ser y ego se desarrolla de acuerdo a los valores familiares. El Sol puede sobrecargar otros planetas en el horóscopo de modos bastante primitivos, cuando la naturaleza-ego del individuo es más fuerte y está desconectada de su sentido consciente de integridad o ética. La naturaleza del Sol es la de irradiar, brillar y exponer todas las cosas a su implacable luz. Es el que busca la atención, el planeta que desafía todo, incluso Plutón, para comprobar su poder. El Sol tiene autoridad, pero igualmente dicha autoridad puede ser indeterminada, frustrada o derrocada por otros planetas, como en el raro caso de una carta en que el Sol no tenga aspectos. La autoridad del Sol también puede dominar otros planetas, no permitiéndoles desarrollar su potencial completo - del mismo modo en que un padre demasiado heroico o mítico puede debilitar el poder de su hijo, un Sol muy dominante puede arrasar el lado más tierno de un individuo.
El Sol representa la imagen del padre arquetípico, el principio heroico, y normalmente se asocia con los papeles masculinos de la familia y la línea paternal. El Sol en la carta puede parecer que está solo. Debemos mantener en mente que el Sol nunca está 'solo' porque Mercurio y Venus nunca están lejos de su imagen central, pero puede ser segregado por la Gestalt del resto del horóscopo, en cuyo caso hay un número de planetas retrógrados. Esto muestra a menudo un individuo con un modo de ser extremadamente único que no se encuentra a gusto con los estándares establecidos de su cultura - ¡particularmente con su sistema familiar!
Al mirar el Sol en la carta, en relación a asuntos familiares, es posible prestar atención de forma inmediata al padre de uno mismo y la imprenta inconsciente en la formación de nuestra psique. La presencia física o ausencia del padre parece irrelevante en la mayoría de los casos, porque la expectativa arquetípica fundamental del padre está marcada por la figura  solar en el horóscopo. La vida no vivida del padre puede estimular el alma de su hijo y de este modo convertirse en un ingrediente en el desarrollo de la personalidad del hijo. Esto resulta claramente positivo y negativo - si tenemos que cargar con expectativas no realistas y superar conscientemente los fallos de nuestro padre, podemos sufrir sentimientos de culpa y responsabilidad injustificados. Nuestro Sol se puede ver restringido en su desarrollo de modo que los temas no resueltos de nuestro padre puedan ser transformados a través de nosotros.
En contraste, un Sol 'sano' puede incitar a un hijo a emular a su padre de formas positivas, viendo claramente que sus fallos o éxitos no son sus propios problemas. Sin embargo, incluso el conocimiento psicológico más básico nos muestra que los complejos no resueltos de nuestros padres son heredados por los hijos para que busquen una solución. Veremos que el legado solar es el que con más frecuencia se hereda a través de la línea paterna, y pasa a las siguientes generaciones. Hombres y mujeres por igual, pueden acarrear con legados paternales - los hombres se identifican más con el principio masculino a través del Sol con respecto a su sentido de identidad masculina y el deseo de construir, conquistar y proteger, mientras que las mujeres utilizan el legado solar en su deseo de controlar y conducir la vida independientemente de las zonas emocionales de las familias y relaciones.
Los aspectos formados por el Sol con otros planetas a menudo son una imagen literal de cómo percibimos a nuestro padre y su influencia en nuestra heroica - productiva- vida. Según mencionamos anteriormente, el Sol necesita de desafíos para desarrollar sus características potenciales y asistir al desarrollo del ego. Generalmente, es el padre quien para sus hijos representa este modelo o papel siendo elusivo, excitante, impredecible en sus apariencias, grande, fuerte, extraño en el nido, influyente en el gobierno de la familia, etc. Esta estructura puede parecer ser arcaica en su descripción, pero los arquetipos se encuentran fueran de lugar y son  la base de nuestra vida social y personal. En ocasiones la influencia del padre es más fuerte por su ausencia o  la inversa por su débil presencia. Al lado de nuestro 'padre', tenemos la imagen del 'padre-celestial' en nuestra psique, y el Sol muestra cuál es.
Las personas en las que han nacido cerca del amanecer o el Sol se encuentra en el MC de la carta experimentan una extraordinaria presión a tener éxito en cualquier empresa que emprendan. Esto puede resultar divertido si a la persona se le permite desarrollar sus intereses de forma progresiva y se le permite mostrar regularmente ¡todo lo que ha conseguido!.Sin embargo, si la presión centra en las habilidades o intereses paternos no instintivos o la expectación es literalmente recibida por el padre, el principio solar se ve frustrado y el ego desarrolla una concha o costra para proteger el Sí mismo más profundo de ser herido o dañado por esta transgresión de la ley natural. El Sol fuertemente emplazado en los ángulos, como en este caso indican una poderosa conexión psicológica con el padre y la persona lleva consigo al padre en cualquier cosa que se presenta al mundo.
Un Sol sin aspectos es una indicación de que el individuo necesita encontrar un modo totalmente nuevo de utilizar su ego para buscar algo fuera de la dinámica familiar que le sirva de guía. Existe una energía inconformista con los planetas sin aspectos, y a menudo indica que un "nuevo alma" ha llegado a la familia para romper las jerarquías profesionales y sociales. La persona con un Sol sin aspectos encontrará excepcionalmente difícil integrarse en la familia, pero intentarán hacerlo hasta que se produzca un giro que les permita despegar en su propia dirección. A menudo su padre no ha sido paternal del modo tradicional, ha sido un 'amigo' o ha estado completamente ausente por circunstancias externas o por elección propia. Existe a menudo un fuerte distanciamiento con el padre, o la figura paternal, pero cómo no hay un aspecto entre el Sol y otro planeta, no existe una imagen clara del padre en la psique. Por lo tanto, la persona, tiene que convertirse en su propio padre, o convertirse en su propia autoridad. Todas las palabras que provienen del latín auctor - autor, autoridad, autenticidad, y todos sus derivados son especialmente significantes para las personas con un Sol sin aspectos. Deben encontrar la validación interna más que buscarla en el exterior. Esto a menudo se traduce en largos periodos de búsqueda de un propósito o dirección en la vida.

Temas Solares en la Dinámica Familiar

Para introducir esta descripción, recuerda que estos son temas, es decir, que se pueden manifestar en uno u otro sentido, abierta o encubiertamente. También pueden hacerse obvios por negación - por ejemplo, un tema Sol-Júpiter puede manifestarse en un miembro de una familia siendo muy introvertido, que nunca viaje a lugares lejanos, con limitados puntos de vista, y poca energía social, mientras otro miembro de la misma familia disfrute de viajar, disponga de una variedad de actividades, y represente para los demás una vida excitante, dramática y expansiva. Del mismo modo, un tema Sol-Saturno puede llevar a ser extremadamente orientado hacia el éxito y las metas como a estar oprimido y ser melancólico, sin desarrollar su completo potencial. Recuerda que en las familias uno puede encontrar una u otra situación - las familias funcionales no son estáticas, siempre están fluyendo y continuamente buscando nuevos modos de acomodarse, comunicar, llegar a un equilibrio, compensar y sobrevivir. Las familias verdadera y severamente disfuncionales no permiten el cambio, el flujo y la acción dinámica y el principio homeostático es muy fuerte y siempre hay un 'miembro identificado', alguien que acarrea con la sombra del -tema- familiar, el chivo expiatorio, la oveja negra o el que rompe el circuito. Como ejemplo, he aquí dos ejemplos de los temas solares energéticos  en la dinámica familiar:
Sol/Marte (incluyendo aspectos solares con  Aries)
La familia es heroica y aventurera, y a menudo, las energías competitivas fluyen a través de la psique familiar. Esto puede generar grandes triunfadores (o contar con miembros fuertemente conservadores y depresivos si Saturno forma parte del tema), tipos ejecutivos y hombres y mujeres hechos a sí mismos. El desarrollo del ego individual sucede a ráfagas y las características erráticas abundan; a menudo un miembro es el líder, el "que brilla" mientras otros parecen perseguir u oscurecer al colectivo familiar. Ser un individuo por derecho propio dentro de una familia Sol/Marte requiere de una fuerza bruta - mental o física; el tímido no sobrevive bien emocionalmente, mientras que los innovadores que disponen de una fuerte originalidad, y una gruesa piel sobreviven. Errantes, inconformistas, renegados e individualistas son respetados con cariño, aunque en ocasiones a regañadientes. Si se combina con Júpiter, existe una atmósfera maniaco-depresiva donde algún miembro se mueve entre los extremos - esta familia a menudo produce un tipo mediador que trota hacia atrás y adelante o que sufre por el antagonismo entre dos miembros de la familia a los que quiere por igual. Un miembro puede tener que retirarse para que la familia al completo sobreviva como un sistema. El equilibrio de la dinámica familiar es tenue y lleno de chispas, que da la sensación de ir de un extremo al otro todo el tiempo. Esta familia atrae personas que apoyan, cuidan y por lo general, compañeros que contrarresten la energía agresiva.
Sol/Urano (incluyendo aspectos solares con Acuario)
Esta es la firma que encontramos en la familia arquetípica desapegada de la que leemos en el capítulo La Familia como Sistema. Hay tanto coraje para ser uno mismo a una edad tan temprana que a menudo se ignora por completo el aspecto necesario de represión y civilización por el bien de la sociedad. Esta es una firma poco convencional para cualquier grupo de gente que desee trabajar junta, a menos que sea vía Internet, Cellnet o transmisión vía satélite. No pensaríamos en este tema familiar como 'cálido', cariñoso preocupado por los sentimientos de los otros miembros del grupo. Esto no significa que no dispongan de ninguno de estos aspectos, no sean sentimental o sean sociopáticos, pero no parecerán ser una familia en su sentido convencional. Lo mejor de la energía Solar/Uraniana anima a la libertad de pensamiento, y acción en las relaciones. El camino para encontrarse a uno mismo está bien desarrollado y aquellos cuyas familias tienen este tema pueden encontrar muy difícil, de hecho, si tienen que suscribirse a una visión más convencional del timo Norman Rockwell. En realidad, el desarrollo del ego personal es estimulado, pero de hecho profundamente amenazador para la familia Sol/Urano ya que es un elemento de competitividad necesario para la individualización. Lo que otros pueden percibir como excentricidad, es percibido como un rasgo normal y valorado. Lo que parece caótico o extraño a los visitantes fuera de la familia es probablemente un sistema de seguridad para los individuos de la propia familia. La privacidad de cada persona dentro de una familia de esta naturaleza asegura que ninguno conozca en realidad quienes son los otros y que piense que él o ella es el 'sano' y que los otros son los excéntricos - cuando, en realidad, todos ellos son 'bastante locos' a su manera. De todos los atributos humanos, pensar es el más meritorio; la creatividad y la innovación son los más valorados; la autocracia es esencial para el descubrimiento de uno mismo y la individualización requiere repetidas idas y venidas hacia y desde la matriz de la familia. La inconsistencia en sí misma es una forma de estabilidad, sin embargo, para cualquier individuo que necesite más atención, más nutrición, más seguridad, éste es un hogar muy poco confortable e incluso cualquier tipo de necesidad corriente puede ser considerada como un comportamiento infantil empalagoso. Parece haber mensajes mezclados flotando alrededor en todo momento - sentimientos ambivalentes abundan en el colectivo Sol/Urano, y si esta agrupación produce un aura distante, frío y distante y desapegado, que finalmente congela la propia existencia - que a menudo es mantenida a raya por una persona de Agua, que exprese las emociones y no sea tan fría, a través del matrimonio o de una relación.

La Luna y sus Fases

En la familia de planetas,la Luna representa dos cosas: la madre y el bebé. Es el necesitado y el que cuidador.La Luna es el 'planeta' que obtiene atención alternativamente lloriqueando, manipulando, insinuando, cambiando de humor, indefenso, infantil, sutil - o afecta a otros planetas en la carta siendo potencialmente silenciosa y sugestiva, útil, cautelosa, preocupada, nutritiva y protectora. Su naturaleza es la de imponerse a otros planetas más lineales de maneras emocionales - sentimientos, comportamiento irracional e implicaciones pueden incluso perturbar al ¡viejo Saturno! Aunquela Luna es reflectiva e implícitamente está relacionada con el Sol (toda la luz que refleja proviene del Sol, o del lado iluminado de la Tierra) es el cuerpo holísticamente más influyente de la familia de los planetas - y en el horóscopo cuando se trata de asuntos familiares.
La Luna representa la imagen maternal, el principio adaptativo, y generalmente,  aunque no siempre, se asocia con las mujeres en la familia - madre, tías, hermanas, y la línea maternal.La Luna es el contenedor de la infancia, su casa durante la formación de su cuerpo y la naturaleza profundamente instintiva. Las respuestas lunares a la vida exterior al útero pueden retrotraerse hasta la corta experiencia intra-uterina. En el útero nosotros somos nuestra madre, no estamos separados, sino que somos un todo con ella. Su nutrición es la nuestra, el latido de su corazón se ajusta al nuestro, sus emociones nos afectan, su cuerpo mantiene el nuestro. La Luna es el planeta más significativo del horóscopo con respecto a la dinámica familiar, ya que es la línea maternal la que actúa como hilo conductor de la transición generacional. La Luna debería ser vista como la respuesta primaria e instintiva a lo que nos da fuerza para vivir. La Luna puede ser el enlace más débil en la carta - uno puede ser fuerte, heroico, creativo, divertido, innovador, brillante y sano, pero emocionalmente estéril, hostil, torturado y pobre.
La Luna en el horóscopo muestra cómo nuestro entorno nos afecta desde el instante del nacimiento - y a partir de esta premisa, cómo percibimos nuestro entorno y la gente en él. El primer contacto con el mundo exterior es el abrazo de nuestra madre. La infancia, con la que nos volvemos a conectar a lo largo de la vida, está impregnada con esta primera imprenta para el resto de nuestra vida. El estado de ánimo en astrología está representado por la Luna -la Luna en la carta natal es ¡el estado de ánimo de la vida para nosotros!
La Luna contiene imágenes de la cuarta casa, y en la cuarta casa reside la fuente ancestral - no sólo la madre sino la combinación del material de las líneas materna y paterna. Esta combinación está contenida en el alambique de la cuarta casa, o el útero del horóscopo y sila Luna es un planeta muy fuerte, entonces existen asuntos personales ancestrales en los que ahondar. Tan sólo en una conversación con nosotros mismos (o con un cliente con un fuerte componente lunar) podemos determinar hasta que punto se trata de un asunto tan sólo maternal.
Un patrón muy significativo en el cual la Luna puede ser problemática, y en realidad habla de ambos progenitores, uno por ausencia y el otro por su excesiva relevancia es la 'Luna amputada'. Cuando la Luna está separada del resto de la Gestalt del horóscopo - el asa de una formación en cubo, es muy difícil para la persona ser capaz de conectar sus sentimientos con su comportamiento, el suyo propio o el de otros. Esta peculiaridad en realidad indica que hubo un serio problema con la feminidad en la familia. Puede indicar el único hombre en una familia de mujeres, o una familia en la que el padre era particularmente débil y no efectivo. Los hombres con esta Luna amputada encuentran más fácil que las mujeres carguen con sus sentimientos que ellos mismos ser responsables de los suyos propios. Es absolutamente necesario para las persona con esta luna separada hacer un esfuerzo consciente para el descubrimiento de sus sentimientos. Un escenario típico en el que se podría llevar a cabo: un hombre no tiene idea de los que una mujer está sintiendo y carga con ideas, planes, expectativas y afirmaciones y se queda estupefacto, horrorizado y se desmaya al descubrir que ella no tiene ni idea de lo que él desea o piensa. Otra situación podría surgir cuando el hombre está tan desconectado de sus propios sentimientos que daña a las mujeres de su entorno utilizando de manera inconsciente sus sentimientos o los de ellas para su propio fin.
Las mujeres que tienen esta configuración curiosamente sienten que se encuentran fuera de sincronía con sus propios sentimientos, tienen una tremenda intuición acerca de otra gente, porque han crecido en un entorno en el cual tenían que dejar de lado sus propios sentimientos para cuidar de los sentimientos de su madre o hermanos. Encuentran que tienen una reacción tardía a las situaciones emocionales y no están en sintonía consigo mismas. Estas mujeres son increíblemente capaces, confiables y tienen un potencial para llevar a cabo muchos trabajos solares, pero sufren en silencio, preguntándose por qué ningún hombre o mujer vendrá para cuidar de ellas.
La Luna segregada es como un gancho, otra gente puede colgar sus sentimientos en él, no dejando lugar a su propietario expresar sus sentimientos. Esto puede resultar triste o ser tan inconsciente que tan sólo sus más íntimos amigos y particularmente, sus amantes serán conscientes de ello. La imagen que viene a la mente es la siguiente: si tuviéramos que plegar el horóscopo por la mitad, de forma que 'plegando' la Luna en la otra mitad de la carta, esta estaría integrada. En un nivel emocional, esto es necesario, y es posible gracias a un esfuerzo consciente y toma de conciencia. Siempre habrá una admirable capacidad para la claridad emocional y objetividad con esta posición, pero su patología es la frialdad, la falta de empatía y las repuestas retardadas. Sería un lugar ideal para la Luna, si se tratase de este modo, utilizando la metáfora de plegar la carta por la mitad, para conseguir la integración.
Temas Lunares en la Dinámica Familiar
Dos ejemplos:
Luna/Venus (incluye los aspectos lunares con Libra y/o Tauro)
La receptividad a la agresión es más poderosa; puede haber un fuerte linaje maternal que polariza en la dicotomía maternal/femenina de la imagen Madonna/Magdalena de la mujer; es decir, sensualidad frente a  sexualidad; maternidad frente a feminidad; expresiva; emocionalmente dominante; un alto nivel en los temas románticos en las relaciones. Puede haber una confusión de valores en la familia, estar de acuerdo o desacuerdo de un fuerte modo pasional en los asuntos emocionales y valores morales. Los sentimientos pueden dominar la capacidad racional de entender lo que se espera de uno. La función de creatividad es muy elevada y a menudo se anima, ya que tantola Luna como Venus tienen que ver con el arte y los sentidos. En la familia, el tono emocional es el principio central, o al menos la persona Luna/Venus responde con fuerza al tono emocional. La nutrición, el cuidado, y el patrón de control es llevado a cabo por hombres y mujeres por igual, pero para los hombres la dicotomía Luna/Venus puede crear un problema en la sexualidad cuando la mujer deja de ser vista como su amante porque el arquetipo de la imagen dual femenina está dividida. La escisión Luna/Venus es natural en el sentido de dos imágenes arquetípicas de la feminidad - la seductora y la maternal nutritiva. Sin embargo, cuandola Luna y Venus se encuentran en un aspecto duro, particularmente por cuadratura u oposición, frecuentemente hay problemas en integrar las dos caras de la feminidad. A menudo, las mujeres - especialmente la madre - en la familia han escondido uno u otro 'lado'. Por ejemplo, ella ha mostrado tan sólo su parte social, industrial y cara de mujer preciosa o ha subordinado su 'papel de seductora' a su papel maternal, sacrificando su sí mismo más exótico, y erótico.
Luna / Plutón  (incluyendo los aspectos lunares con Escorpio)
Algo escondido acecha en la historia familiar; el tono emocional es intenso, controlador y persuasivo. Esto procede probablemente de la línea maternal, donde las mujeres suelen ser dominantes por su habilidad de manejar la psique y este material. Este es el indicador más fuerte de que hay un secreto familiar, que emergerá a través de uno de los miembros que lo hereden y que tengan la Luna en Escorpio, en la octava casa, o algún aspecto fuerte con Plutón. La línea familiar está repleta de sanadores y magos, de aquellos que hacen las leyes y de los que las quebrantan. Quizá en parte debido a su increíble resistencia emocional, a una edad temprana se alcanza una percepción más profunda y la madurez emocional, aunque por lo general esta experimentada actitud está directamente relacionada con alguna forma de exposición a experiencias 'adultas' y situaciones incomprensibles para la mente de un niño y que catapultan al individuo hacia una prematura adolescencia. A menudo es necesario alguna forma de amputación emocional, por el bien del individuo, aunque siempre saldrá a la superficie más tarde. Esta característica se abre paso a través de todas las familias con un tema Plutoniano, y como resultado, suelen ser particularmente sensibles a los asuntos ocultos y siempre subjetivos al chantaje emocional y el miedo a la pérdida. Las peleas familiares son comunes, a veces durante toda la vida, la mayoría de las veces por el poder de lucha. Los individuos de la familia pueden experimentar sentimientos de soledad en habitaciones repletas de gente - ya que la historia familiar está siempre presente. Existe una poderosa conexión psíquica de la madre con otros miembros de la familia; el padre puede quedar en un segundo plano, aunque ejerciendo cierto poder por su ausencia emocional o física. Puede existir un fuerte apego a la venganza, falta de capacidad de perdonar y dejar el orgullo de lado en favor de la armonía. Los mitos sobre la historia familiar están repletos de excéntricos, rebeldes, imperialistas, invasores, renegados, vaqueros/indios, parientes ilegítimos, sacerdotes expulsados, monjas no practicantes, desapariciones misteriosas, secretos y muertes inexplicables