En ocasiones ocurre que, cuando queremos elegir el
almutén de un lugar, dos o tres planetas tienen la misma fuerza al sumar
las dignidades que tiene cada uno en ese lugar, y no estamos seguros de
cuál de ellos escoger. Pues bien, aquí os dejo a mi modo de ver una
herramienta útil para quienes elegimos el almutén conforme al sistema
clásico (usando las tablas de dignidades) pero todavía no comprendemos
el efecto astrológico suficientemente bien como para discernir por
nosotros mismos en todos los casos qué planeta elegir entre varios de
igual fortaleza.
En el primer capítulo de su libro de las Natividades (edición de 1540 anotada por Regiomontano), Antonio Montulmo aclara cómo ha de escogerse el almutén, diciendo que "será el planeta que más dignidades esenciales tenga allí, y en caso de que varios planetas tengan las mismas dignidades, entonces será Almutén el planeta que aspecte a ese lugar, y si ambos aspectasen de igual forma entonces el que se encuentre en un ángulo más fuerte. Y si también estuvieran iguales en eso elegiremos aquel que esté en su Háiz, más afín al Sol en la carta, que no esté bajo los rayos del sol y que aspecte de mejor aspecto a ese lugar".
Por otro lado y ya como curiosidad, Montulmo aclara en el mismo capítulo que el aspecto no ha de tenerse en cuenta para elegir el almutén más que para decidir entre varios planetas que tengan igual de dignidades en ese lugar, pues hasta entonces algunos astrólogos elegían directamente como almutén el planeta que aspectase aunque fuese otro planeta quien tuviese más dignidades. Esta división entre los astrólogos viene desde que Ptolomeo dejó dicho en su tetrabiblos que el almutén era el planeta con más dignidades y que aspectara a ese lugar, sin especificar qué era más importante, si la fortaleza por dignidades o el aspecto. Después de él, entre los que opinan que el aspecto no es necesario se encuentran Alcabitius y Leopoldo de Austria, mientras que Guido Bonatti elige el almutén directamente por el aspecto. Alí Ben Ragel considera el aspecto necesario en el capítulo 9 del libro I del Cumplido pero en el capítulo 10 sin embargo no lo tiene en cuenta.
Además, pone un ejemplo de astrología horaria para demostrar que tiene razón al no considerar el aspecto. "Uno día me fue presentado un principio de enfermedad de cierta señora noble, de la cual quise saber si debía librarse o morir por el único método de la astronomía. Libra estaba en la octava casa, y el señor del ascendente era la Luna, y consideré como Almutén de la octava a Saturno, aunque no aspectaba a dicho lugar por ningún aspecto y Venus, que estaba en la novena, sí que aspectaba. La Luna se alejaba de Saturno y se unía a [formaba aspecto con] Venus bajo la tierra, de donde juzgué que la señora atravesaría un peligro de muerte por poco, y porque se juntaba bajo la tierra a Venus, que estaba muy dignificada en Libra, dije que la señora debía acercarse al peligro por una segunda sacudida, pero no tan intensa como habría sido la primera. Y que esta señora debía librarse pronto. Y dije que la enfermedad era nueva, y de esto no expongo aquí las causas, y todas estas cosas sucedieron en verdad. De lo que se deduce que, si Venus fuese el Almutén de la octava, habría juzgado que la señora debía morir pronto, porque no había ningún aspecto de las fortunas, ni ninguna conjunción corporal benévola, estando la Luna existente mal dispuesta, con la conjunción predicha se deduce la muerte de dicha señora. Y esto es lo que he visto en todos los juicios por mi experiencia".
Por cierto, adjunto aquí las tablas con las dignidades (los términos son los egipcios) por si a alguien le interesan Tabla_de_almutenes_diurno.pdf Tabla_de_almutenes__nocturno.pdf Adjunto también el primer capítulo del Libro de Montulmo, que he traducido del latín, para quien le interese leerlo Montulmo%20-%20Cap%C3%ADtulo%20I.pdf
http://astrologica.ning.com/profiles/blog/show?id=4249087%3ABlogPost%3A67026&commentId=4249087%3AComment%3A67175&xg_source=activity
En el primer capítulo de su libro de las Natividades (edición de 1540 anotada por Regiomontano), Antonio Montulmo aclara cómo ha de escogerse el almutén, diciendo que "será el planeta que más dignidades esenciales tenga allí, y en caso de que varios planetas tengan las mismas dignidades, entonces será Almutén el planeta que aspecte a ese lugar, y si ambos aspectasen de igual forma entonces el que se encuentre en un ángulo más fuerte. Y si también estuvieran iguales en eso elegiremos aquel que esté en su Háiz, más afín al Sol en la carta, que no esté bajo los rayos del sol y que aspecte de mejor aspecto a ese lugar".
Por otro lado y ya como curiosidad, Montulmo aclara en el mismo capítulo que el aspecto no ha de tenerse en cuenta para elegir el almutén más que para decidir entre varios planetas que tengan igual de dignidades en ese lugar, pues hasta entonces algunos astrólogos elegían directamente como almutén el planeta que aspectase aunque fuese otro planeta quien tuviese más dignidades. Esta división entre los astrólogos viene desde que Ptolomeo dejó dicho en su tetrabiblos que el almutén era el planeta con más dignidades y que aspectara a ese lugar, sin especificar qué era más importante, si la fortaleza por dignidades o el aspecto. Después de él, entre los que opinan que el aspecto no es necesario se encuentran Alcabitius y Leopoldo de Austria, mientras que Guido Bonatti elige el almutén directamente por el aspecto. Alí Ben Ragel considera el aspecto necesario en el capítulo 9 del libro I del Cumplido pero en el capítulo 10 sin embargo no lo tiene en cuenta.
Además, pone un ejemplo de astrología horaria para demostrar que tiene razón al no considerar el aspecto. "Uno día me fue presentado un principio de enfermedad de cierta señora noble, de la cual quise saber si debía librarse o morir por el único método de la astronomía. Libra estaba en la octava casa, y el señor del ascendente era la Luna, y consideré como Almutén de la octava a Saturno, aunque no aspectaba a dicho lugar por ningún aspecto y Venus, que estaba en la novena, sí que aspectaba. La Luna se alejaba de Saturno y se unía a [formaba aspecto con] Venus bajo la tierra, de donde juzgué que la señora atravesaría un peligro de muerte por poco, y porque se juntaba bajo la tierra a Venus, que estaba muy dignificada en Libra, dije que la señora debía acercarse al peligro por una segunda sacudida, pero no tan intensa como habría sido la primera. Y que esta señora debía librarse pronto. Y dije que la enfermedad era nueva, y de esto no expongo aquí las causas, y todas estas cosas sucedieron en verdad. De lo que se deduce que, si Venus fuese el Almutén de la octava, habría juzgado que la señora debía morir pronto, porque no había ningún aspecto de las fortunas, ni ninguna conjunción corporal benévola, estando la Luna existente mal dispuesta, con la conjunción predicha se deduce la muerte de dicha señora. Y esto es lo que he visto en todos los juicios por mi experiencia".
Por cierto, adjunto aquí las tablas con las dignidades (los términos son los egipcios) por si a alguien le interesan Tabla_de_almutenes_diurno.pdf Tabla_de_almutenes__nocturno.pdf Adjunto también el primer capítulo del Libro de Montulmo, que he traducido del latín, para quien le interese leerlo Montulmo%20-%20Cap%C3%ADtulo%20I.pdf
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