sábado, 7 de septiembre de 2019

El arte de amar. De Erich Fromm












El arte de amar es un libro escrito por el sociólogo, psicólogo, filósofo y humanista judío alemán Erich Fromm, miembro de la llamada Escuela de Frankfurt. El libro se publicó originalmente en inglés con el título The Art of Loving (1956, ISBN 78-0061129735), y su traducción al español apareció en 1959. En el 2000 la Biblioteca Erich Fromm lanzó una nueva edición publicada por la editora Paidós.
En este libro, Fromm recapitula y complementa los principios teóricos acerca de la naturaleza humana que ya había comenzado a desarrollar en El miedo a la libertad y en Ética y psicoanálisis. Fromm postula que el amor puede ser producto de un estudio teórico puesto que es un arte, "así como es un arte el vivir" y, para el dominio de cualquier arte es imperiosamente necesario que se llegue a un dominio profundo, tanto de la teoría como de la práctica. El libro contiene cuatro capítulos:

  • I. ¿Es el amor un arte?
  • II. La teoría del amor
  • III. El amor y su desintegración en la sociedad contemporánea
  • IV. La práctica del amor

https://es.wikipedia.org/wiki/El_arte_de_amar_(Fromm)

https://www.marcelozamora.com/archivos/files/Fromm,Erich,El%20arte%20de%20amar.pdf



viernes, 6 de septiembre de 2019

Sobre la adivinación. Cicerón












Como ya indicábamos en la introducción general a estos tratados, contenida en el volumen dedicado al De natura deorum («Sobre la naturaleza de los dioses»), Cicerón con­cibió sus escritos De natura deorum, De divinatione y De fato como una especie de trilogía (cf. Div. II 3, así comoNat. III 19; Div. I 8; Fat. I ) 1. Los temas que aparecen en ellos se consideraban íntimamente ligados entre sí: la exis­tencia de la adivinación dependía, en última instancia, de que pudiera demostrarse la existencia de una divinidad de carácter providente (que era la que sancionaba, en principio,la práctica de tal adivinación; cf. Div. I 9-10), mientras que el concepto de destino dependía asimismo en gran medida— sobre todo en el pensamiento estoico— de aquel que se tuviera de divinidad, al tiempo que sustentaba, desde un punto de vista teórico, la creencia en la adivinación (Div. II19). Es natural, por tanto, que abunden las referencias cru­zadas entre estas obras, las cuales, pese a la gran diferencia de concepción literaria que se observa entre ellas, habrían de leerse, en realidad, como un todo unitario


http://libroesoterico.com/biblioteca/ESPECIALES2/Ciceron-Sobre-la-adivinacion-Sobre-el-destino-Timeo.pdf

jueves, 5 de septiembre de 2019

Ted Bundy, asesino serial.














Theodore «Ted» Robert Cowell Bundy (Burlington, Vermont; 24 de noviembre de 1946 - Bradford, Florida; 24 de enero de 1989) fue un secuestrador, violador y asesino en serie de mujeres estadounidenses. Después de más de una década negándolo, confesó treinta homicidios que cometió en siete estados entre 1974 y 1978. El número real de víctimas es desconocido.
Se le comprobaron treinta asesinatos, fue condenado a muerte y ejecutado en la silla eléctrica el 24 de enero de 1989.1
https://es.wikipedia.org/wiki/Ted_Bundy


Astrodienst dice que nació a 22.35 p.m, pero yo creo que nació a  las 21.40 p.m.







Veamos su carta en Sinastría a las Direcciones Primarias, para la fecha de su ejecución,  24.01.1989








Para mi es significativa la Dirección Primaria de la cúspide de casa VIII, sobre el Parte del Infortunio.

Curiosamente Urano de Primarias también está sobre su Parte de la Fortuna en casa XII, que tendría Determinaciones de muerte en la silla eléctrica.


En su carta natal nos encontramos con un Antiscio de Marte entre Júpiter ( regente de casa VIII ), y Venus ( en Exilio).

También Neptuno, en casa III, está en oposición partil con el Parte del Infortunio,

Y además es regente de casa VIII.

Lo que me hace pensar que no estaba nada bien de la cabeza.

 Plutón en conjunción al Ascendente , y Saturno en Exilio, en casa XII.






Veamos para finalizar, el gráfico triple para el día de su ejecución.







Tenemos la Luna de Profección sobre el Parte de Infortunio de RS muy cerca del Medio cielo, que representa una ejecución que se hace pública.

Y la cúspide de casa VIII de Profección sobre el Nodo sur de RS, indicando el final.



Tratados morales. Séneca.












Los Tratados morales son pequeñas obras, no propiamente diálogos sino ensayos sobre problemas de moral. Los temas abordados en ellos son muy variados, desde cómo ha de ser la clemencia de los gobernantes, hasta cómo debe el sabio aprovechar su tiempo de ocio: De la Providencia, De la firmeza del sabio, De la felicidad, De la vida retirada o del ocio, De la serenidad del alma, De la brevedad de la vida, De la clemencia y, además, la Consolación a Polibio constituyen un libro en el que Séneca, el más ilustre exponente del estoicismo de la época imperial, nos muestra su filosofía del vir fortis, del dominio de sí mismo, de la fidelidad a la propia conciencia y de la entrega y servicio a los demás.

http://www.ataun.net/BIBLIOTECAGRATUITA/Cl%C3%A1sicos%20en%20Espa%C3%B1ol/Lucio%20Anneo%20S%C3%A9neca/Tratados%20morales.pdf

 

miércoles, 4 de septiembre de 2019

Epicuro. Carta a Meneceo.















La Carta a Meneceo es el documento fundamental de la ética epicúrea que ha llegado hasta nosotros. Representa, ciertamente, una pequeña muestra de las ocupaciones de Epicuro con la filosofía práctica, si se considera la pérdida de numerosas y probablemente extensas obras de un autor tan excepcionalmente prolífico: Del fin, De las elecciones y los rechazos, Del amor, De [los géneros de] vidas (cuatrolibros), De la justicia y demás virtudes, De las obras justas, Opiniones acerca de las pasiones, sin contar otros tratados y varias Epístolas, según el catálogo que transmite Diógenes Laercio. Es a éste a quien debemos la conservación del texto íntegro de la Carta, así como de otras dos, a Heródoto y a Pitocles, y de las Máximas Capitales, que, junto a las Sentencias Vaticanas y a otros fragmentos, forman el corpus epicureum.
 Pero, a pesar de lo exiguo del legado, la Carta a Meneceo tiene un valor precioso, porque en ella ofrece Epicuro un resumen de su concepción ética, el cual, aunque está aliviado de las copiosas argumentaciones que seguramente poblaban los tratados, permite hacerse una idea casi completa de aquélla. Sólo las relaciones humanas y sociales, cuya consideración está presidida por los respectivos conceptos de amistad y de justicia, no reciben tratamiento expreso aquí; las Máximas Capitales y las Sentencias Vaticanas aportan el indispensable complemento sobre esas materias.


http://onomazein.letras.uc.cl/Articulos/4/23_Oyarzun.pdf



Epicuro. De Carlos García Gual










Supongo que el deseo de redactar unas páginas de prólogo a este libro podría ser catalogado entre los deseos innecesarios y no naturales, esos que, si no son saciados, no producen pesar ni dolor. Pero no vaya renunciar al placer módico de escribir estas líneas, porque, en primer lugar, me gusta prologar mis libros, y también porque pienso que tal vez aquí podría justificar, en la medida en que pueda justificarse cualquier otro libro sobre filosofía antigua, este intento de comprensión del epicureísmo, tan maltratado y trivializado por una tradición exegética hostil, por motivos ideológicos, y por las versiones rutinarias de los manuales más o menos académicos. La rutina es, por cierto, más perniciosa que la hostilidad, por-que perdura más gracias a la comodidad y economía que supone repetir los tópicos. Con razón, creo, se ha dicho que ningún otro filósofo de la Antigüedad ha sido tan calumniado como Epicuro el materialista, el hedonista, el negador de la inmortalidad del alma Y de la providencia divina, y, por tanto, el enemigo de la religión y del Estado. Pero no se trata aho-ra de reivindicar la herencia subversiva, ni de apologizar su memoria, ni de advertir el fermento revolucionario del viejo filósofo. Todo eso ya se ha hecho, y los libros de P. Nizan y
 B. Farrington han tenido una curiosa divulgación. Por otro lado, la bibliografía especializada sobre Epicuro y su doctrina ha sido muy interesante, en cantidad y en calidad, en los últimos lustros, de modo que la imagen del filósofo y sus sentencias han quedado precisadas por la crítica filológica actual. No sólo contamos con una edición excelente de sus fragmentarios textos (la de G. Arrighetti, de 1960, y 2.8 ed. de 1973), y con centenas de artículos doctos, sino con algunos estudios de conjunto que me parecen una excelente introducción para su estudio. Conviene destacar entre ellos los de J. M. Rist: Epi-eurus (Cambridge, 1972), de G. Rodis-Lewis: Épicure et son école (París, 1975), y de A. A. Long: Hellenistic Philosophy (1974; trad. española, La filosofía helenística, Madrid, Alianza Edit., 1984).


http://pdfhumanidades.com/sites/default/files/apuntes/104_Garc%C3%ADa%20Gual%2C%20Carlos%20-%20Epicuro_0.pdf


Nuestros ascendientes llegados del cosmos. Por Maurice Chatelain












Hace unos años, en los últimos días de un mes de setiembre, yo me encontraba en París para asistir a un Congreso internacional de Astronáutica, en el que yo debía pronunciar una conferencia sobre el tema de las comunicaciones espaciales. En el curso de este Congreso tuve ocasión de entrar en contacto con algunos sabios rusos de mi especialidad y de intercambiar ideas con ellos. Después de haber hablado de las comunicaciones en el espacio durante unos minutos, llegamos con toda naturalidad al asunto de las comunicaciones con las civilizaciones extraterrestres. Me quedé sorprendido al descubrir que esta cuestión, muy popular en Francia, había sido estudiada igualmente en la URSS, donde varios centros de investigación, financiados por el Gobierno, intentaban ponerse en contacto con esas civilizaciones del espacio, mientras que otros se esforzaban por descubrir pruebas ciertas de su paso por la Tierra y de sus visitas a nuestros antepasados, millares de años atrás. Me enteré de que en dichos centros se trabajaba en estrecha colaboración con grupos investigadores extranjeros, en Francia y en otros países europeos, y me asombró la cantidad de pruebas ya obtenidas, así como la cantidad de problemas nuevos planteados por esos descubrimientos. Por razones difíciles de concretar, estos trabajos no habían sido publicados en las revistas científicas habituales, y los informes correspondientes pasaban verbalmente de un grupo de investigación a otro, lo cual explicaba por qué yo no había......