viernes, 5 de abril de 2019
Sobre hippies y sueños rotos.
Los hippies no iban a Vietnam, venían de familias adineradas la mayoría.
Pero muchos tuvieron que ir igualmente.
La sociedad estadounidense de la época, conservadora y encorsetada, se vió sorprendida por una nueva juventud emergente que quería hacer el amor y no la guerra.
La música vehiculó todo eso.
Pero claro, al establishment no le interesaba ese tipo de juventud izquierdosa y antisistema
Se sacó de la manga las drogas duras y a los gurús comecocos, para anorrear toda esa energía que se les escapaba de las manos.
El hippismo se acabó convirtiendo en una caricatura de si mismo, y acabó en la basura de la Historia.
Y una vez más, triunfaron las fuerzas del maligno, ¿ no os parece ?.
Os lo dice un hippie reciclado.
Pero no muerto.
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